Mirar mucho, mirar con atención, buscar y rebuscar, cada cuadro de Van der Weyden requiere su tiempo porque hay tantos detalles que podríamos pasar...
Disponible hasta 27-02-2115
23/03/2015 00:01:16Mirar mucho, mirar con atención, buscar y rebuscar, cada cuadro de Van der Weyden requiere su tiempo porque hay tantos detalles que podríamos pasar...
Disponible hasta 27-02-2115
23/03/2015 00:01:16Disponible hasta: 27-02-2115 15:48:00
Mirar mucho, mirar con atención, buscar y rebuscar, cada cuadro de Van der Weyden requiere su tiempo porque hay tantos detalles que podríamos pasar horas delante de ellos. Por ejemplo las lágrimas, pocos artistas han pintado las lágrimas como este belga que nació el último año del siglo XIV.
Son lágrimas que hasta cuesta que nuestras cámaras vean, lágrimas delicadas que utilizando la técnica giga píxel de Google podemos apreciar al detalle.
El calvario, el descendimiento, y el tríptico de Miraflores con sus lágrimas juntas en la misma exposición por primera vez en lo que supondrá un festín para los amantes del arte.
El calvario prestado por Patrimonio Nacional se presenta en todo su esplendor pero hasta colgar en esta pared ha tenido un cuidadoso proceso de restauración, se curaron sus heridas y se le dio todo tipo de mimos para que podamos, como decíamos al principio, mirarlo con todo lujo de detalle y pasar horas estremecidos por la forma de pintar de este gótico flamenco que hace que nos sintamos pequeños viendo su obra.
No se sorprendan si viendo la exposición se les escapa alguna lágrima, es la emoción.