Navalny regresa a Rusia a pesar de la amenaza de detención y pide a sus seguidores que acudan a recibirlo

Navalny, de 44 años, culpa a los servicios secretos rusos de haberto envenenado por orden de Putin, aunque el Kremlim lo niega. Fue en Tomsk, una ciudad de Siberia, antes de tomar un avión en el que enfermó súbitamente. Lo hospitalizaron tras un aterrizaje de emergencia y días después lo trasladaron a Berlín por voluntad de su familia. Fue allí donde confirmaron la existencia en su cuerpo de novichok, una sustancia tóxica de uso militar. Navalny ha estado cinco meses recuperándose. A su vuelta a Moscú, tendrá que afrontar la orden de busca y captura que pesa sobre él por violar la libertad condicional, ya que fue condenado por estafa en 2014 en un juicio sin garantías.