Arte solidario y arte para evadirnos en tiempos de coronavirus

Para que se hagan una idea estos muñecos de ojos enormes son el sello del malagueño Javier Calleja. Triunfan especialmente en Asia y Estados Unidos y, entre sus compradores: artistas como el DJ Steve Aoki. En otoño debía ver la luz una edición especial de este muñeco, 250 como él, pero con la crisis del Covid decidieron adelantarla. Con sus beneficios han subvencionado mascarillas y han conseguido que muchos de sus coleccionistas asiáticos también envíen material. Lo cuenta Carlota, ella y otros nueves artistas emergentes han donado sus obras a Mensajero de la Paz.."Aqui pintamos todos" se llama la iniciativa de la plataforma de artistas on line, Helarea, que además ha abierto un crowdfunding para que recaudar fondos. Y como el arte también nos eleva y nos ayuda a desconectar, mirar y admirar. Los museos han seguido con su labor estos días en las redes. El Reina Sofía por ejemplo ha colgado esta exposición de una ciudad casi vacía. Esta es la versión que hace Alex de la Santa Catalina de Caravaggio que cuelga en el Thyssen porque el Museo ha abierto ya su concurso de versiones. El de arte contemporáneo de Málaga adapta sus cuadros para que los coloreen los niños y el del Prado nos devuelve la sonrisa de su Gioconda particular, una obra que sabe lo que es vivir durante años de puertas para dentro.