Hoy Bankia ha subido las escaleras que dan acceso a la Bolsa de Madrid. Un banco formado por lo que antes fueron cajas y que se estrenaba con este mensaje de su presidente.
Las cajas de ahorros somos capaces de adaptarnos a entornos mucho más exigentes y complejos, transformándonos en bancos y en sociedades cotizadas en un tiempo récord pero al mismo tiempo sin perder nuestras señas de identidad.
Justo a mediodía, nada más sonar esta campana las acciones de Bankia empezaron a someterse a los vaivenes de los mercados. En los primeros minutos llegaron a caer más del 6% pero al cierre de la sesión habían recuperado su precio inicial. Bankia ha salido a Bolsa con un descuento del 60% sobre su valor contable.
El momento probablemente no es el idóneo, tanto por el mercado en general como por el contexto en particular de la banca, y precisamente la mala percepción que ahora tienen todos los inversores con respecto a la conversión de las cajas a bancos.
Cerca de 350.000 pequeños ahorradores se han convertido en bankeros, con ka, y el propio Rato ha comprado 250.000 euros en acciones a título personal. Además, unos 300 inversores institucionales también han dado su apoyo a Bankia. De todos ellos han salido 3.000 millones de euros con los que la ya cuarta entidad financiera por capitalización ha salido a Bolsa.
La salida de Bankia, poner precio a las cosas, ver el valor en libros, poner precio al sector inmobiliario yo creo que es muy positivo también. Por lo tanto yo creo que es la continuidad de ese proceso de reestructuración.
El capital principal de la entidad supera el nueve y medio por ciento, por encima, pues, del 8% mínimo que exige el Banco de España.
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