Entrevista a Mori: "Grabar 'Vanish' con $kyhook ha sido un sueño hecho realidad"
- El músico de Ceuta ha grabado recientemente con Natalia Lacunza y $kyhook
- Música entre el low-fi, el pop, el indie y estética trap
El 2020 está siendo un año muy complicado para la industria cultural. Se avecina un verano sin festivales, de conciertos con limitaciones y parones en los proyectos más esperados. Pero hay algo que ni una pandemia puede parar: los bedroom producers. Músicos que convierten su habitación en el epicentro de su universo creativo, donde experimentan sin complejos y de donde probablemente saldrán los grandes talentos de la música de los próximos años.
Uno de los más prometedores es Mori, un músico y productor que en pocos meses ha entrado en la escena musical con temas con letras poéticas, con acordes planos de guitarra, sintetizadores y un ambiente nebuloso. Ya ha cambiado el bedroom por el estudio, y en las últimas semanas su nombre suena con fuerza después de haber trabajado en el segundo álbum de Natalia Lacunza y su colaboración más reciente con $kyhook en "Vanish".
Una carrera meteórica teniendo en cuenta que Mori comenzó a componer hace poco, "en la navidad de 2017-2018", inspirado por artistas del pop más alternativo que se estaba haciendo fuera de España "como Clairo, Cuco, Temporex, chavales que hacían música en su casa y les iba bastante guay, fue mi inspiración: si ellos podían hacer música bonita en su habitación, ¡yo también!", nos cuenta Mori en una entrevista a Playz.
El resultado es una música con sello propio, inclasificable, que a él le mismo le cuesta enmarcar pero define como entre low-fi y el pop y entre el indie y el trap: "No creo que haga trap, pero a través de mi estética sí entro en ese mundo más traperillo. Todos los artistas que más me inspiran tienen en común algo que les faltaba a muchos grupos indies, que no tenían una cara y una estética tan marcada. Y los traperos sí tienen eso. Aunque su música no es súperbuena, tienen un personaje, una estética y una música con lo que conforman un todo. Si yo hiciera música vistiendo como un chaval normalillo de la Complutense, sería distinto".
Detrás del "personaje" de Mori encontramos a Martín Moreno (Ceuta, 19 años), un estudiante de Administración y Dirección de Empresas de la Universidad Carlos III. Al que su pasión por la música le viene de familia (su padrastro era productor de música tecno) y sus años de Conservatorio, donde estudió piano clásico hasta el segundo año del grado profesional.
P.- ¿Cómo pasas de ser un chaval que compone en su habitación a estar colaborando con $kyhook, uno de los productores más destacados del momento?
R.- Ha sido un paso súpergrande, todo fue a partir de la canción "Que no". La saqué a principios de abril (del pasado año) y de repente se hizo muy viral. Natalia Lacunza llegó también a esta canción. Subió un cover a su Instagram, escribió a mi mánager y me fui de Ceuta a Madrid a grabar con ella. Y ya ahí en el estudio me encontré a $kyhook. Él me dijo que quería hacer una canción conmigo, ¡no me lo podía creer! Pensé que a lo mejor no iba muy en serio, pero a los meses coincidimos de nuevo en una fiesta, le pasé la primera prueba de "Vanish" y a los dos días ya estaba en Barcelona grabando con él, como un sueño hecho realidad. En España no hay nadie que me guste más que $kyhook y Pedro Ladroga.
P.- El primer disco de Natalia Lacunza era muy distinto, en su seguno EP escuchamos un sonido mucho más propio, más definido, ¿qué has aportado tú en su sonido? ¿Cómo ha sido trabajar juntos?
R.- Empezamos componiendo una canción que terminamos descartando y comenzamos de nuevo. Al final salió "Llueve", hicimos la estructura de la canción juntos, y por mi parte si suena a Mori es porque tiene los instrumentos que suelo utilizar en mis canciones. Y sobre Natalia, ella es la persona más maja del mundo, es muy fácil trabajar con ella. Yo tenía un estereotipo de la gente de OT en general y Natalia me ha hecho cambiar ese pensamiento, me ha hecho pensar que la gente de OT es como cualquier músico. Son gente que le ponen cariño a las cosas que hacen, eso es lo fundamental en un buen músico, independientemente del estilo de música que hagan.
P.- ¿Trabajar con Natalia te ha llevado a escuchar música más comercial?
R.- Lo más comercial que estoy escuchando ahora es el disco Pop Negro de El Guincho, lo estoy reescuchando muchos años después de que me los descubriera mi padrastro. Él es productor de tecno, mi padre también ha pinchado toda la vida, así que mi gusto por la música viene de mi familia. Otros artistas más alternativos que estoy escuchando ahora son Chico Blanco, Yves Tumor, Yeek, o Bejo, del que me encanta todo lo que hace.
P.- ¿Y para cuando colaboración con Pedro Ladroga? (Icono de Playz, por cierto)
R.- ¡Ojalá! Lo conocí así como de pasada, bueno para él sería de pasada pero para mí fue lo más grande. Es más, yo conozco Playz por las cosas que hacéis con Pedro Ladroga. Es el más grande, no hay nadie en España que haga un trap tan personal como él.
P.- En un momento en el que estabas profesionalmente creciendo mucho, entiendo que la pandemia habrá frenado muchos proyectos, ¿qué planeas para los próximos meses?
R.- He perdido un montón de bolos, pero ahora voy a firmar por una editorial para hacer más trabajo de autor. Me interesa mucho no hacer música solo como Mori, sino componer para otros. Hacer música que a priori no sea de mi estilo, porque creo que haciendo cosas diferentes, más voy a aprender. También tengo pendiente sacar dos o tres temas antes o durante el verano, y grabar mi EP en estos meses también.
P.- ¿Ya puedes vivir de la música en exclusiva?
R.- De momento no, pero soy un afortunado porque mi familia se puede permitir mantenerme mientras siga estudiando. Ahora estoy estudiando ADE y el próximo curso me voy a matricular en Comunicación Audiovisual en la Carlos III. De hecho esta cuarentena lo que más estoy haciendo es estudiar matemáticas y economía para selectividad (Ebau), porque la nota de la específica solo dura dos años y tengo que volver a examinarme para entrar en Comunicación. ¡Ya ves qué gracia! Con todo esto he pasado una cuarentena poco inspirado, pero ya me he aclimatado a la situación.