La pedrada a Pablo López y otras agresiones vividas en los escenarios
- Un intento de agresión con una piedra mientras daba un concierto en Albacete le obligó a retirarse del escenario
- A veces son los propios artistas quienes paran la actuación para denunciar una agresión entre el público
Desde el pasado 2 de septiembre, Pablo López es noticia y tendencia en Twitter España, y no por dar el cante precisamente. Un intento de agresión con una piedra mientras daba un concierto en Albacete tiene la culpa. Se dice que fue alguien desde fuera del recinto el responsable de la lamentable actuación que hizo que el cantante se retirase llorando del escenario.
La piedra dio en el blanco, el piano de Pablo. El artista intentó continuar con el concierto, pero fue incapaz. Se le quebraba la voz, y unos minutos después, decidió retirarse. Según varios testimonios en Twitter, el cantante se ausentó durante 15 minutos para volver con más fuerza que nunca. Le bastó su guitarra, una silla y la mascarilla para sentarse entre su público que no dejó de arroparle en ningún momento. Las redes se volcaron con el cantante, quien desde anoche no ha dejado de recibir tuits de apoyo.
Las agresiones en los conciertos, algo más común de lo que parece
Pero a veces ocurre justo lo contrario. En lugar de que el agresor obliga a parar un concierto, es el artista quien para el concierto para denunciar una agresión. El pasado mes de enero, el grupo Carolina Durante interrumpió su show en Valencia para denunciar un acto de violencia machista que estaba produciéndose entre el público. En mitad de la actuación, Diego Ibáñez (vocalista del grupo) dejó de cantar y gritó por el micrófono: "¡Tú, fuera! Vas a pegar a una chavala, no me jodas, macho". Al instante, la seguridad del local se hizo cargo del incidente.
Un caso que dio la vuelta al mundo fue cuando Sam Carter, cantante del grupo británico Architects, paró sin temblarle la voz su propio concierto para denunciar una agresión sexual que estaba ocurriendo entre el público. Sucedió durante el Festival Lowlands, en Holanda. Según denunció posteriormente el cantante británico, unos chicos estaban llevando a una joven en volandas cuando uno de ellos le tocó un pecho. "Te he visto agarrándole una teta. Lo he visto. Es jodidamente asqueroso y este no es el puto sitio para esa mierda", denunciaba Carter.
Después, el artista exclamó que no quería volver a ver algo así en su concierto: "¡No es tu puto cuerpo y no se agarra a nadie, no en mi puto concierto!". Las redes se hicieron eco de la noticia y hasta Pedro Sánchez lo mencionó en su cuenta oficial de Twitter.