¿Somos cada vez más infantiles?
Si antepones los videojuegos a tus propios amigos, coleccionas figuritas y pasas la mayor parte de tu tiempo libre viendo series de anime, entonces puede que no seas la persona más madura del país. Desde youtubers hasta otakus, la cultura nunca había estirado tanto la juventud. Pero ¿son nuestros referentes infantiles? ¿Qué diferencia un adolescente de un adulto? ¿Por qué no queremos crecer?
Nos acompañan Valeria Díaz aka Fakebuddy, tiktoker; Kapo 013 (@kapo013oficial), periodista, freestyler y youtuber; Alba Vidal aka Koala Rabioso, artista visual multidisciplinar; Rubén Díez, Doctor en Sociología y Profesor del Departamento de Sociología Aplicada de la Universidad Complutense de Madrid; y Ana Iris Simón (@anarcoirisimon), periodista, guionista y escritora. Por último, se incorporan Marina Fornés, estudiante de Trabajo Social y Educación Social; y León Picarón, youtuber.
¿Por qué somos infantiles?
A raíz de un artículo escrito por Ana Iris sobre la infantilización de la sociedad occidental, "Los youtubers y sus sillas que lucen, la infantilización de Occidente y viceversa", la polémica está servida. Para ella, los youtubers no son culpables de esta infantilización. “Tenemos en España un 40% de paro, los jóvenes tienen que invertir más del 90% de su sueldo si quieren vivir solos, y nos emancipamos de media a los 29 años”. Y, justamente, son estas condiciones las que realmente “nos impiden ser adultos”.
Nuestra tiktoker de referencia, Fakebuddy, siente que la palabra adulto le queda todavía muy lejos: “Técnicamente sería un adulto porque tengo más de 18 años, tengo 20, pero ser un adulto es más de impuestos, el sueldo, hacer la compra, el llevar una vida aburrida”.
“Evidentemente cuesta mucho más ser adulto y, sobre todo, ser independiente y construir tu propia realidad desde unas posibilidades cada vez más limitadas”, opina Kapo 013. Sin embargo, él no está del todo de acuerdo con el artículo: “Estamos confundiendo la ‘idotización’ de la sociedad con la infantilización, para mí ser infantil no tiene una connotación negativa”. Aun así, Ana Iris insiste: “El problema no está en las gorras trucker ni en las lucecitas ni nada, el problema es los problemas que subyacen”.
¿Qué significa ser adulto?
Rubén, como doctor en Sociología, quiere separar dos aspectos: “En el concepto de juventud tenemos una parte biológica que es la edad, pero luego entra un componente simbólico que es sentirse joven que es ahí donde entra el debate de si estamos alargando esa parte simbólica y de si nos sentimos jóvenes”.
“Yo entiendo que la gente no quiera ser adulta, nadie quiere, todos queremos ser jóvenes y lo vamos a alargar lo máximo posible”, defiende Valeria. Para Ana Iris el problema no es “comprar Funkos” sino que “no somos conscientes de que detrás hay una cosmovisión”. Además, la escritora cuenta que “los rituales de paso se han diluido totalmente, ¿qué significaba antes ser adulto? Pues pasar a la mesa de los mayores, comer con los padres, ser un miembro de pleno hecho y derecho en la sociedad, el problema es que nosotros no lo podemos ser y estéticamente no queremos”.
A Alba este argumento no le acaba de convencer, y no duda en compararlo con generaciones anteriores: “Mi abuela tenía las estanterías llenas de muñecas de porcelana y yo ahora tengo Funkos, ¿qué diferencia hay? Yo tengo un póster de Marvel y mi abuela de Jesucristo”.