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ENTREVISTA

Sharif: "Creía que el freestlyle perjudicaba al rap hasta que descubrí a Bnet"

  • "Siento que luchaba en el lado del rap que trasciende y creo que hemos perdido la batalla"
  • "Hoy en día los chavales no tienen ni dinero, ni esperanza"
  • Entrevista al icono del rap en español que el próximo 8 de octubre lanza su sexto álbum, 'De Inmensidades'.

Por
Sharif
Sharif

Sharif sobrepasa los 40 años, pero sigue conectando como nadie con los jóvenes a través de sus letras y su rap. El próximo 8 de octubre sale a la venta su sexto álbum de estudio, De Inmensidades, y hemos tenido la oportunidad de compartir con él su alegría y sus sensaciones antes del lanzamiento. Hemos charlado largo y tendido, desde la distancia, pues en estos momentos el cantante se encuentra trabajando en México, pero con la sensación de estar en la misma habitación y de ser amigos de toda la vida.

De este nuevo proyecto, que está a punto de salir, ya conocíamos "Lumbre", su colaboración con el popular rapero mexicano Charles Ans. Ahora sabemos también que estará compuesto por un total de 15 temas con importantes colaboraciones, como Ñeto Peña, y que los fans que compren el disco físico podrán disfrutar de una sorpresa muy especial en su interior. Eso nos ha desvelado Sharif en esta entrevista, además de otras muchas cosas.

Es casi imposible no empatizar con este zaragozano. Al instante, sin conecerte previamente, se abre y se explaya sobre todos los temas que le preguntes. Él no se corta y habla siempre desde el alma, como lo haría un poeta. Pero mejor que lo leas de sus propias palabras.

P: De Inmensidades, tu sexto disco está ya a puntito de salir ¿nervios o cuáles son las sensaciones que tienes ahora mismo?

R: El 8 de octubre sale. Estaré nervioso cuando tenga que presentarlo un poco por aquí, por México. Haremos un par de firmas, aunque creo que ni siquiera ahí estaré nervioso, porque la verdad es que las firmas son geniales porque solo vienen fans a decirte cosas bonitas. Ahora mismo me pondría mucho más nervioso haberme montado en el avión y volar a España como estaba de enfermo. (Sharif nos contó que acababa de pasar un virus gástrico y que todavía no se encontraba en las mejores condiciones.)

P: En una entrevista con Playz hace poco dijiste que tenías muchas ganas de un buen viaje con tu chica, ¿lo lograste?

R: La verdad es que sí. Por lo menos, de los 14 días que hemos estado de vacaciones, solo han sido malos los tres últimos. Ha sido un viaje precioso. México es un país increíble. Yo por trabajo tengo la suerte de que ya había estado, pero mi novia no, y en pareja es otro tipo de viaje y ha sido la hostia.

P: ¿Ves ahora mejor la situación que hace unos meses?

R: Sí, claro... Te vas quitando espinitas. Por un lado, llevábamos como un año y medio encerrados y lo de viajar era como algo que necesitábamos. Mi novia trabaja mucho y siempre hacemos un pequeño viaje al año, que es como nuestra pequeña válvula de escape. Es algo que, sobre todo a ella, le da mucho oxígeno para el resto del año. Yo tengo mucha suerte, porque como vivo de lo que amo no tengo tanta presión en la cabeza, pero mi novia necesita esas pequeñas escapaditas para poder volver a la rutina con fuerza. Entonces, esa espinita quitada, pero me queda la de los conciertos. Tengo ya muchas ganas de tocar en directo.

P: ¿Tienes tus esperanzas puestas en salir a petarlo sobre el escenario este año?

R: Pues para este año no me programé nada, porque en estos dos años de Covid parece que hacías cuentas y salían rosarios. Programabas algo y había que posponerlo, llegaba la fecha de la posposición y había que volver a posponerlo... Mil cosas de este tipo. Así que este año no hemos programado nada, pero espero que ya para el año que viene se pueda. Estando en México estoy viendo muchos artistas haciendo conciertos multitudinarios. Entiendo que con las medidas de seguridad y de salud pública correspondientes. Así que poco a poco.

P: ¿No sé si eres de la idea de que esta pandemia nos ha hecho mejorar como personas o todo lo contrario?

R: No sé... Yo tengo 41 años y no tengo nada de esperanza en el ser humano. Es decir, creo que somos estúpidos por naturaleza. Aunque no me gusta hablar de poderes fácticos, ni de manos en la sombra, sí que pienso que en el mundo en que vivimos hay gente que les interesa tenernos polarizados, distraídos y un poco idiotizados y creo que no hemos aprendido la lección. Cuando me fui de España, no paraba de ver cosas súper surrealistas, como miles de jóvenes haciendo botellones y teniendo que cargar la policía contra ellos. Pero, ¿en qué clase de mundo sin sentido vivimos? Solo os queréis ir de fiesta y por iros de fiesta os enfrentáis a la policía. Estas cosas me dan la medida de lo poco empáticos que somos, de lo poco que estamos dispuestos a sacrificarnos y de lo poco que hemos aprendido.

P: Luego está la versión de esos jóvenes que defienden que la mayoría no son así y que los medios los han puesto a ellos como culpables. ¿Qué opinas: son ellos los culpables de todo?

R: Claro, si por eso cuando te hablo de estos poderes en la sombra, a los que no me gusta culpar, incluyo en gran estancia a los medios que son capaces de mostrar lo que quieren y condicionar la realidad. Sé que no todos los jóvenes son así. Es como todo: hay jóvenes increíbles y los hay capullos. Igual que hay gente adulta increíble y adultos que son capullos.

P: Hablando de jóvenes, ¿cómo ves el relevo generacional en el rap?

R: Creo que sí, creo que la cultura y el arte lo bueno que tienen es que se saben renovar. Me da un poco de miedo cuando el capitalismo exacerbado engulle cualquier disciplina artística, porque se pervierte un poco la esencia de ese arte. ¿Qué quiero decir con esto? Cuando yo me acerco al rap por primera vez, me acerco porque busco y encuentro en él un lugar al que pertenecer, además de porque la estética y el discurso me llaman la atención. Pero busco algo que me identifica, me fraterniza... El rap me hace tener esperanza. Creo que hay algo muy importante en esto; cuando haces algo sin esperar nada a cambio, solo por el placer de hacerlo. Creo que esa es una de las claves de la felicidad, por un lado para no frustrarte cuando no consigues las cosas, porque si lo disfrutas cuando lo estás haciendo ya conseguir algo no es tan relevante. Y sobre todo, porque no perviertes la esencia de esa disciplina artística. Yo cuando entré al rap lo que veía y escuchaba era a gente luchando por construir algo bonito sin recibir nada a cambio. Solo formar parte de algo era suficiente. Y ahora lo que me preocupa es que los chavales creo que se acercan al rap esperando conseguir algo a cambio.

P: ¿Quizás la situación de precariedad actual lo ha transformado todo en un negocio?

R: Para mí esa excusa no es suficiente. Yo vengo de una familia humilde, soy el pequeño de cuatro hermanos y mi familia no ha hecho otra cosa que trabajar toda la vida. Entiendo que a lo mejor nosotros no teníamos dinero, pero teníamos esperanza. Hoy en día no tienen ni dinero, ni esperanza. Lo cual es todavía más triste. Entonces, entiendo lo que dices, pero no sé... Cuando yo empecé en el rap ya había las dos vertientes: el rap consciente y el rap comercial, que venía desde América. Siento que luchaba y militaba en el lado del rap que trascienda y considero que hemos perdido la batalla. A la gente ahora le gustaba llevar cadenas, relojes de oro y gafas de 2.000 euros. Si es que el capitalismo donde ve negocio, se mete. Como ocurre ya con la comida vegana y el ecologismo, por ejemplo. Yo lo que critico es el capitalismo exacerbado, el que todo valga a cambio de ganar. No todo vale, tiene que haber algún límite.

P: Estamos viendo en los jóvenes cada vez más diversidad, más libres para hablar de sexualidades diferentes, más abiertos… ¿Por qué crees que esto todavía no se ve tan reflejado en el rap?

R: Quiero pensar que si no estamos ahí es porque estamos llegando. Todavía tengo la esperanza de que el rap no es más que un vehículo que traduce o enseña las inquietudes o los movimientos culturales de cada generación. Y si estos parámetros de una sexualidad más líquida o que no exista un género tan definido están ahí, el rap debería de llegar. También es verdad que los cambios son lentos, es como todo. Tampoco se ve que haya futbolistas abiertamente homosexuales...

P: Pero el fútbol siempre ha sido algo retrógrado, ¿el rap también lo es?

R: Fíjate, con todo lo retrógrado que es el fútbol, estando aquí en México, me ha flipado ver mucho fútbol femenino por la televisión. En España también lo hay. Estoy viendo también a peleadoras increíbles en la UFC. Entonces, sí que puedo decir que existía un discurso totalmente binario, pero noto que sí la sociedad está cambiando en eso, el resto de ramas como la música, los deportes o la literatura llegará. Costará un poco porque es como un dominó: desde que se tumba la primera ficha hasta que cae la última, el proceso no es inmediato, pero es irremediable desde el momento en que se tumba la primera ficha. Costará un poco, pero llegará si la sociedad sigue así.

P: ¿Faltan todavía referentes en el mundo hispano?

R: Claro, porque países como México, al que yo amo mucho, todavía son tremendamente machistas. Tampoco podemos venir con nuestra mentalidad europea a pedirles que cambian de la noche a la mañana. Ayer, que estaba un poco nostálgico porque se acababa de ir mi novia, me fui a dar una vuelta. Me puse los cascos y me fui a caminar. Llegué a una plaza enorme, aquí los espacios públicos son enormes, y de repente había unos chavales patinando, otros vendiendo comida, gente mayor hablando con sus hijos, chavales de 16 años todos con el pelo de colores y con una sexualidad muy poco definida. Y estaban todos bailando en la calle, eran por lo menos 200. Te cuento esto porque me sorprendió tanto que en México, que es un país un poco conservador, ya tienen una nueva generación de chavales nada tradicionales, que no tiene la división de roles que tenían sus padres. Quién sabe si alguno de ellos se hace rapero o rapera. De repente tendríamos ya esa representación.

P: ¿Seguiste la FMS Internacional? ¿Quién era tú fav?

R: Yo denostaba el freestyle, para mí era algo que perjudicaba al rap. Estaba cansado de ese discurso de: "Tu madre es una zorra" o "Te voy a despellejar". Me parecía que era tirarnos piedras a nuestro propio tejado. Pero hace un par de años descubrí la FMS y descubrí a BNET, sobre todo le descubrí a él. Eso me abrió la mente y me permitió descubrir a otros raperos de FMS y desde entonces mi opinión sobre el freestyle ha cambiado radicalmente y me parece que está lleno de fueras de serie y que gracias a Dios ha mejorado muchísimo desde que yo era un crío. Se ha convertido en otra cosa. Es verdad que a veces sigue siendo un poco gritarse mucho y demás, pero hay bastantes exponentes muy buenos. Es verdad que para mí Bnet es Dios. Se que ha dejado la competición y me parece bien que lo haya hecho porque creo que es demasiado bueno y tiene unas inquietudes que le obligan a salir de ahí, crecer y experimentar. Él ya se ha pasado el juego.

P: ¿Por qué crees que muchos freestylers dejan el circuito tan pronto?

R: Creo que depende mucho de cada caso. Chuty lo dejó y Skone también, pero son otra generación. El caso de Bnet para mí es distinto. Chuty o Skone creo que lo dejan porque el freestyle y la competición a ese nivel desgasta mucho y llevaban muchos años. Encima el éxito aburguesa y acomoda. Por ejemplo, a Chuty no me lo imagino preparando un disco de estudio, aunque me lo imagino haciendo otras mil cosas porque tiene mucho talento y puede hacer lo que quiera. Es mi sensación, igual que tampoco me imagino a Skone haciendo música de estudio. Y, sin embargo, a Bnet sí que lo veo.

P: ¿Le ofrecerías algo a Bnet?

R: No le ofrecería nada, porque ni siquiera creo que él quisiera. Yo soy un tipo lo suficientemente listo como para no meterme en guerras que de antemano se que voy a perder. Creo que a él tampoco le interesaría, entonces prefiero ahorrarme la negativa. Por otro lado, estoy deseando ver que va a hacer fuera del freestyle. Tengo mis esperanzas puestas en él, pero ni siquiera se lo que está haciendo. Estoy expectante.

P: ¿Lo de hablar de ti casi siempre en tus canciones es una terapia o es narcisismo?

R: No, no es narcisismo. Es que desde hace mucho tiempo pienso que la escritura es un camino para conocerse a uno mismo. Pienso que somos muchos y que nunca nos terminamos de conocer del todo y que escribir es una buena forma de intentar profundizar en nosotros mismos y a la vez tiene mucho de terapia. Yo he estudiado filología y una de las cosas que más me sorprendió es aprender que se activan partes distintas del cerebro cuando hablamos que cuando escribimos. No utilizamos exactamente la misma zona del lenguaje, se acciona algo diferente. Además, la escritura tiene un componente de intimidad. Yo escribo siempre en soledad y siento que soy yo desdoblándome, mirándome en múltiples espejos.

P: ¿Qué nos espera con tu próximo disco?

R: Lo único que diré es que la edición física cuenta con un track que es un discurso en audio que me regaló mi amigo Original Juan y es una de las cosas más bonitas que he tenido en mis discos. Solo va a estar en el disco físico, a Spotify no lo voy a subir. Es precioso.