Tauromaquia: ¿cultura o tortura?
- En el programa de hoy de Gen Playz hablamos sobre tauromaquia
- ¿Nos siguen interesando los toros a los jóvenes?
- ¿Cómo surge esta tradición?
La noticia de que los toros quedaban excluidos del bono cultural de 400 euros para jóvenes ha reabierto el debate sobre si la tauromaquia es cultura o no. ¿Nos interesan las corridas de toros a los jóvenes? ¿Hay que poner el alma en el ruedo para que sepas que te quiero como decía Chayanne?
Hoy nos acompañan Chapu Apaolaza (@chapuapaolaza), portavoz de la Fundación Toro de Lidia; Gonzalo Caballero (@gonzalocaballeroo), torero; Álvaro Burdiel (@agburdiel), novillero con picadores y estudiante de ADE; Laura Almarcha, veterinaria, vocal de AVATMA y miembro de Associació Cetàcea; Miriam Jiménez (@miriamjlas), socióloga, politóloga, vegana y activista; y Ernestro Castro, filósofo. ¡Dentro Gen Playz!
En peores plazas hemos toreado…
¿Son los toros cultura?
Sabemos que el debate de toros sí o toros no no es nuevo. Álvaro reconoce que ha tenido que enfrentarse a muchas conversaciones tensas sobre este asunto: “En el 90% de los casos acaban bien, no me he sentado siempre con antitaurinos profesionales, por así decirlo, pero sí con gente del día a día, y la mayoría está en contra por desconocimiento, cuando te escuchan no he convencido a muchos, pero he logrado que me respeten”. Sin duda, el respeto es vital y, a veces, es incluso mejor que la admiración.
De hecho, la tauromaquia es bastante más antigua de lo que nos podíamos llegar a imaginar. Menos mal que nuestro filósofo de cabecera, Ernesto Castro, nos lo explica: “Es una tradición mediterránea clásica, está en casi todas las tradicionales prelatinas, en España hay documentos escritos acerca de este asunto casi desde el siglo XI, pero con un espectáculo muy distinto al que vemos hoy”.
"No he logrado convencer a nadie, pero he logrado que me respeten"
Lo que realmente le molesta a Chapu de los antitaurinos no es que lo sean sino la imagen que tienen de los taurinos. “Yo creo que de todos los prototipos que se han arrojado sobre la tauromaquia el más chungo es el que somos unos viejos apestosos, la España del puro y que somos gente muy vieja que dentro de poco morirá y desaparecerá la tauromaquia”, se queja.
“La gente que más va a los toros son los jóvenes de 18 años, la franja de 15 a 19 años han ido a los toros un 21% más que la media”, apunta Chapu. “Esta cosa de que los jóvenes no van a toros es una chatarra insoportable, no es verdad”, continúa el portavoz de la Fundación Toro de Lidia.
Mientras, Laura desde el Zoom nos cuenta por qué la tauromaquia no debería incluirse en el bono cultural: “Cada uno es libre de ir o no a la ópera o a un concierto de heavy, pero aquí estamos hablando de la libertad de ir a un espectáculo donde se maltrata a un animal hasta la muerte, yo creo que ahí no entra la libertad, perdón, hay un animal que está sufriendo”.
"Es un espectáculo donde un animal sufre"
El caso de Miriam es cuanto menos curioso. De pequeña era taurina, ahora es vegana. Eso si que es una metamorfosis. “Yo iba a la plaza de toros activamente con mi familia, dejé de ser taurina a los 15 años”, recuerda. “Creo que la libertad acaba cuando termina la libertad de los toros, creo que los animales no se posicionan delante del torero por propia voluntad, eso no es querer a un animal” resalta.
Como intervención final, a Chapu le parece muy interesante el animalismo. “Este movimiento pretende que todos los animales tengan derecho a la vida y por eso quieren prohibir no solo la tauromaquia sino la gastronomía, la relación con los animales, nos considera iguales a los animales”, explica.
Por último, Ernesto reflexiona sobre la tauromaquia: “Tenemos que reconocer que nos gusta ver al toro sufrir porque sufre y hay una cartasis, hay una diferencia entre el que está ahí en la arena poniendo su vida en juego y el que está fumándose un puro, al final es un conflicto entre la ética y la estética, la ética del toro y el torero que están jugándose la vida y la estética del que contempla distanciadamente aquel espectáculo sublime”.