Pelos, canas y calvos en el Focus Group de Gen Playz
- En el Focus Group de Gen Playz hablamos sobre pelos
- ¿Por qué nos da miedo quedarnos calvos?
- ¿Tenemos el pelo que nos gustaría tener?
Toca hablar de un asunto peliagudo: los pelos. Hoy hablamos de por qué los pelos son importantes en nuestra vida —o por qué no lo son— si solo son filamentos delgados y flexibles que salen la piel. Da un poco de grima, lo sé. Vamos al grano, digo… al pelo.
Para tratar este tema nos acompañan unos invitados inmejorables: Marina Merino, Dani Zúñiga, Pablo Santos, Beatriz Patón, Pilar de Francisco, Roi Méndez y Mafer aka Virtual Diva.
¿Cómo nos afecta el peinado que llevamos?
Todos conocemos a alguien que ha llorado porque el peluquero le ha cortado más que “solo las puntas” y ha terminado con el corte de pelo de Amélie. I know. También conocemos a un amigo que le están saliendo entradas y desde entonces no se quita la gorra. ¿Es un trauma quedarse calvo? ¿Por qué es tan importante nuestro corte de pelo?
Mafer comienza explicando que tiene el pelo afro y eso le ha supuesto más de un quebradero de cabeza: “Yo he tenido el pelo siempre muy, muy rizado, entonces es un relación de amor/odio, me encanta mi pelo pero, a veces, no tengo ni la energía ni las ganas de cuidarlo ni mantenerlo, es un pelo que conlleva tiempo, esfuerzo y dinero”.
Por su parte, a Beatriz también ha tenido una relación amor/odio con su pelo, aunque hay que decir que ahora le flipa tenerlo así. “Con 14 y 15 años era odio absoluto a esas primeras canas que me arrancaba como una loca para que nadie se enterara que las tenía, era brutal”, confiesa.
En la adolescencia, Pilar también pasó por lo mismo que Bea y Mafer. “Me acomplejaba muchísimo el pelo rizado, tenía un poco la presión de tener que alisármelo, me regalaron una plancha del pelo como indirecta sutil”, explica.
"Me arrancaba las canas como una loca para que nadie se enterase"
Por otro lado, Dani ha sufrido todo esto pero en las cabezas de sus clientas. “La gente está acostumbrada a rechazar su textura natural del pelo, lo ideal sería aceptar tu textura y aprender a trabajarla, en España hay poca cultura de trabajar el pelo rizado”, se queja el peluquero. Si nos lo dice él, nosotros nos fiamos.
Por último, Roi nos anima a ser como somos porque siempre hay alguien que admira nuestro peinado: “Siempre pasa en el tema capilar y es que nos gusta el pelo del otro y el nuestro no. Lo que pasa es el mi referente capilar quiere tener el pelo como yo y yo como él”.