Amaia Romero, tras su paso por 'OT': "Me veía sin derecho a sentirme mal porque lo tenía todo"
- La ganadora de Operación Triunfo 2017 y el actor Jaime Lorente hablaron sobre salud mental en el programa de Gonzo
- Jaime: "No soy lo suficiente es la frase que más me he repetido"
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No resulta extraño comprobar cómo artistas de todas las disciplinas aprovechan su influencia para alzar la voz y, de una vez por todas, defender públicamente la importancia que posee estar bajo una correcta salud mental. Dos ejemplos de éxito y que no dejan ninguna duda de que los problemas psicológicos pueden venir en el mejor momento profesional de cualquiera de nosotros son Amaia Romero, ganadora de OT 2017 y Jaime Lorente, protagonista de ficciones como La casa de Papel o El Cid.
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Durante un encuentro en el programa Salvados, ambos quisieron visibilizar una situación que afecta a miles de personas en todo el país, y más desde que dio comienzo la pandemia. Uno de los problemas que ambos sufrieron en primera persona fue el del Síndrome del Impostor, aquel que impide que una persona sea capaz de valorar y creerse los logros obtenidos. "Soy una persona muy insegura y con muchos prejuicios. Cuando iba al estudio, me sentía pequeña y tenía miedo a decepcionar y a que se dieran cuenta de que no valía", confesaba la cantante.
"Tras OT estuve un año sin ser consciente de todo"
Si la fama te llega de forma progresiva, es habitual que una persona también sea capaz de ir adaptándose a ella. Pero, ¿qué ocurre cuando estalla de un día para otro y no hay tiempo material para asimilarla? Eso es precisamente lo que confiesa haber sentido Amaia tras su paso por la Academia de Operación Triunfo: "Desde que terminó -OT- estuve un año sin ser consciente de lo que había pasado". Una sensación que se acrecentó después de trasladar su residencia a Barcelona y darse cuenta de que vivía "desganada con todo": "Me veía sin derecho a sentirme mal porque lo tenía todo".
Los que sigan a Amaia en redes sociales sabrán que la de Pamplona no es muy asidua en ellas. Cuando hay algún lanzamiento próximo o quiere contar algo importante sobre su carrera, acude a sus perfiles para trasladar el mensaje a los miles de seguidores que posee en Twitter e Instagram, pero durante el programa desveló que en más de una ocasión se ha sentido tentada a eliminarlos: "Usar las redes hacía que me comparase con otras chicas y me sintiera fea. Ahora es algo que poco a poco he ido trabajando".
"La casa de papel lo revienta y yo soy una persona triste"
Jaime Lorente tampoco quiso desaprovechar la ocasión de contar su experiencia en prime time. El actor, que alcanzó la fama mundial gracias al éxito obtenido con La casa de papel, confesó haberse sentido como un souvenir cuando la gente comenzó a pedirle fotos por la calle sin ni siquiera preguntarle cómo se encontraba: "Yo sigo siendo el de siempre, no soy un personaje público. Necesito que la gente me mire como una persona normal".
Al igual que Amaia, Lorente echa la vista atrás y afirma que los problemas de ansiedad y estrés venían de atrás, aunque el éxito profesional los acrecentara: "La casa de papel lo revienta y yo soy una persona triste. El miedo a no sentirse querido, no dar la talla y fallar antes lo podía mantener en secreto porque no estaba expuesto. "No soy lo suficiente" es la frase que más me he repetido". Unas emociones que concluía al explicar lo mucho que trabajará para que su hija no sufra lo mismo que él: "Yo no vivo la paternidad como un lugar de exigencias. Como ser humano va a haber muchas cosas que no voy a saber hacer bien, pero voy a luchar mucho para tener con mi hija ese canal -de comunicación- abierto. Las cosas están cambiando, ella no es culpable de mis miedos e inseguridades. Y ese tiene que ser el trabajo".