Ambkor: "Los raperos que vienen ahora, de raperos cada vez tienen menos"

• Ambkor vuelve a reivindicar el rap de sentimientos en su nuevo álbum: Nudos
• Hablamos con él sobre salud mental, rap, pandemia, redes sociales y el peligroso mensaje de ser tu propio jefe

Ambkor

Este fin de semana, a pesar de las dificultades que se ha encontrado a última hora, el rapero ha iniciado su gira española en Madrid. Ahora está de camino a México para presentar su último disco 'Nudos'. En otoño de 2022 estará girando por Latinoamérica, un lugar dónde se siente como en casa. México, Colombia, Chile, Argentina y Uruguay están en su lista, pero antes charlamos con él. Una conversación que no tiene desperdicio alguno y de la que se pueden sacar muchas lecciones de vida.

Ambkor acaba de publicar 'Nudos', un álbum muy trabajado. "A nivel de tiempo, el más largo de mi carrera", comenta. El artista vuelve a reivindicar el rap de sentimientos, un rap que va más allá de los clichés recurrentes del género. Sus letras no hablan de drogas, de coches caros, de oro o de chicas en bikini. Ambkor habla desde el corazón, reivindica las emociones, la salud mental, los miedos o el ser uno mismo siempre. Descubrimos a Óscar de la Torre, alias Ambkor, en esta entrevista.

P: ¿Cómo enfocas esta gira?

Pues, de puta madre, porque vendemos muchas entradas que al final es lo importante. Estamos muy contentos. Teníamos muchas ganas de empezar después de dos años de parón con la pandemia y con todo. Al final lo importante es que haya gente que decida venir a verte y pagar.

P: Vivimos en la total incertidumbre y es normal que la gente esté ansiosa. ¿Incluso ves más ganas que antes?

R: Sí, hay incluso un poco de ansiedad al ver que no puedes hacer algunas cosas que hacías antes.

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P: ¿A nivel personal tú lo has vivido así?

R: Yo, al principio, la verdad que lo llevé bastante bien, porque al final los que teníamos la suerte de tener ciertos ingresos digitales, pues podíamos vivir sin hacer conciertos. Pero sí que es verdad, que con el tiempo, no estar en la carretera con tus compis, girando, cantando, compartiendo con la gente y toda esa adrenalina. Al final te das cuenta, cuando pasa el tiempo, que era muy parte de tu vida. Era como parte de ti y el último año ya se empezó a atragantar la situación.

P: ¿Es algo bastante común entre los artistas?

R: Sí, a mí lo que más me gusta es escribir y luego cantar en directo, todo el proceso del medio no me gusta nada. Lo hago porque sé que lo tengo que hacer.

P: Nos has dicho que cuando estás triste escribes y cuando estás contento vives el momento. ¿En qué momento estás ahora?

R: Sí, cada uno la escritura la usa de una manera y yo siempre la he usado para desahogarme. Yo soy de que cuando estoy feliz y contento, estoy disfrutando de ese momento. No lo estoy ni escribiendo, ni echándole una foto. Es cuando estoy mal, cuando siento la necesidad de escribir, desahogarme... Por eso muchas veces mis canciones tienen ese punto triste. No es que yo sea una persona que esté triste todo el rato, sino que es mi herramienta para combatir la tristeza.

P: Vivimos en la tiranía de la felicidad. ¿El rap se salva de esto?

R: El rap se salvaba un poco de eso, pero ya no, porque los raperos que vienen ahora, de raperos cada vez tienen menos. Y, además, me da la sensación de que la gente está pensando en triunfar antes que en transmitir. Cuando te digo que yo el rap lo uso como herramienta para mí es porque me ayuda. Y eso al final me ha hecho ganar dinero, hacer giras y ser conocido, pero la raíz no era esa. Ahora veo que la gente quiere las cosas muy rápido y además el objetivo a veces es más petarlo y ser molón, que realmente una necesidad de escribir.

P: ¿Pero esto viene de una necesidad económica y de mensajes como el "sé tu propio jefe"?

R: Creo que hay mensajes muy peligrosos circulando por ahí, porque nadie te enseña nada que le esté haciendo rico. Si algo te está haciendo rico, normalmente te lo callas. Si que hay casos de gente que tiene necesidad y si tienen talento, pues que aprovechen para vivir de ello. Pero, en general, creo que hay mucha vagancia y una falta de retos en mucha parte de la juventud. Hay unas ganas de, a través de que las redes sociales se han comido el mundo, de ser popular, unas ganas de tener lo que tiene el otro, de vivir como te enseñan estos mentirosos de los bitcoins, todas estas cosas... Entonces, creo que lo que estás viendo es el coche caro, no estás viendo el proceso para llegar a comprártelo ni si te llena realmente luego ese coche caro. A lo mejor sigues estando triste o vacío. Hay de todo, pero yo hablo de una foto general. Veo gente que no sabe lo que está persiguiendo, ni si lo que persigue le va a hacer feliz. Lo que sabe es que popularmente lo que mola es tener dinero, seguidores y todo eso.

P: En esta sociedad de las redes y la inmediatez, tú te presentas con un álbum muy trabajado, ¿no?

R: Sí, a nivel de tiempo es el que más hemos tardado en sacar. Además el trabajo ha sido duro. También queríamos hacer un poco eso. Nosotros hubo un momento en que rompimos mucho sacando todas las canciones con su videoclip, sacando uno cada dos semanas. Nos funcionó muy bien. Precisamente ahora con toda la saturación de cosas nuevas, dijimos: "espera, vamos a volver a ser un poco fieles a que la gente se siente a escuchar, tenga unas cuantas canciones inéditas y las pueda escuchar como el conjunto que tú tenías en la cabeza. Al final, con el tiempo, sin querer o queriendo buscas separarte un poco de lo repetitivo. Hemos querido volver a cosas que igual parecen un poco más tradicionales, pero que ahora mismo son más raras que las de estar todo el rato sacando contenido nuevo. El concepto Ambkor es el de no somos una churrería. No porque nos pidas churros, vamos a hacer churros. Esto es creatividad, arte y ganas de hacer las cosas bien. Y si te cansas de Ambkor porque tarda en sacar algo nuevo, pues no pasa nada, hay un montón de música más. Lo que queremos es que la gente sepa que las cosas no se hacen de un día para otro y que lo hacemos con un montón de cariño.

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P: Ser tu propio jefe también es eso, ¿no?

R: Cuando dicen lo de ser tu propio jefe, casi todos lo dicen de mentira. Porque los que piensan que son sus jefes, se pasan el día en redes diciendo: "¿Qué os parece si saco tema","1000 comentarios y lo saco". Entonces, tío, no eres tu propio jefe. Eres un bienqueda. Si eres tu propio jefe, no le preguntas a la gente cuándo sacar tu canción.

P: Has dicho en redes que has llegado a tocar fondo. ¿Cómo se sale de ahí?

R: No tiene una respuesta clara. Creo que para salir del fondo, aunque suene sencillo y simple, es no tener prisas para salir. Las prisas te hunden más. Cuando tú aceptas que estás mal y que solo la paciencia se llevará el dolor, es cuando puedes empezar a apreciar cosas de repente y tener ratitos buenos. Si tú estás abajo pensando tengo que salir ya, tengo que salir ya, solo te vas a hundir más. Es mi percepción a partir de cómo he vivido yo mis depresiones.

P: ¿Cómo describirías tu relación con las redes?

R: Creo que las redes, a final, hasta al que le gustaban menos ha tenido que estar ahí. Es la forma de comunicar. Entonces, yo guay. Estoy pendiente de ellas, me gusta más o menos interactuar con la gente, además tengo un perfil de fans que me encanta, el perfil de la gente que me sigue me representa bastante. Sin el punto obsesivo, porque al final las redes son empresas privadas que hacen lo que quieren y pueden modificar tu alcance. Al final estás en sus manos. Entonces, con el tiempo he intentado disfrutarlas, pero tampoco creo que sea un artista muy de redes sociales.

P: En redes se te ve bastante transparente. ¿Las usas un poco para desahogarte?

R: Sí, porque normalmente te dicen: "oye, pero tu alter ego, ¿por qué? ¿Cómo te llamas como artista?". Pues me llamo Ambkor. Y la gente te pregunta que tiene de diferente Ambkor a Óscar. Yo he intentado con los años poder responder a esa pregunta y decir nada. Mi objetivo era ese. Al principio ese nombre de Ambkor me defendía de muchas cosas o me hacía ser más chulo, y con el tiempo me di cuenta de que no me gustaba eso. Me gusta la sensación de que cuando escuchas a Ambkor, me estás escuchando a mí. Poder ir a los sitios y no tener que poner una pose. Ser Óscar. Entonces, unir eso ha sido perfecto para mí. Soy todo el rato yo y es más cómodo. No tengo que fingir nada.

P: ¿Óscar siempre ha sido o le han dejado ser auténtico?

R: Yo empecé con 15 años y con esa edad no enseñas tanto tus miedos o te da mas vergüenza. Entonces, con el escudo del personaje vas haciendo las cosas. No es que no nos pareciéramos, pero el personaje parecía más fuerte o tenía menos miedo que yo. Al final el que lo saca todo adelante es uno mismo, así que hay que juntarlo. Yo abogo porque la gente descubra sus miedos. Nos han dicho que hay cosas que tenemos que son miedos o inseguridades y no, son formas de ser. Si a ti, por ejemplo, no te gusta la velocidad no es una inseguridad, es tu forma de ser y te tienes que querer tal cual. Ser como eres no es un problema.

P: Dime dos nombres signos de autenticidad.

R: Hay mucha gente muy buena y con mucho talento. De rap te puedo decir dos o diez. Kaze me parece un artistazo, Morad también. Son gente que realmente tiene una forma de expresar totalmente diferente a la mía, pero me parece que tienen talento. Yo no quiero que en la música se hable todo el rato de las cosas que hablo yo porque a mí son las cosas que me gustan. Lo que quiero es que suene auténtica y que me transmita algo, incluso alegría o ganas de bailar. A mí me gusta J Balvin, por ejemplo. O sea, quiero decir, se puede escuchar de todo. Lo que no quiero es tantas colas de personas intentando copiar un producto que funciona. Me gustaría que hubiese más gente intentando crear un producto nuevo porque es su pasión. Porque cuando tú tienes pasión por algo, te pegan mil collejas, te echan de mil sitios y te queda aún fuerza para seguir. La parte creativa nace de las personas, no se suele hacer. De pequeño ya se manifiesta. Entonces dejemos que el arte surja y no lo prefabriquemos tanto.

P: "Ahora que se vacila de esos delitos que antes se cometían por necesidad". ¿A qué te refieres exactamente?

R: Pues que estamos en una sociedad ahora que escucha canciones de gente diciendo he robado un iphone o vendo marihuana y tal. Primero, los que venden realmente marihuana y ganan dinero, están calladitos porque son inteligentes. Antes se robaba por necesidad y no se enorgullecían de ello. Porque ni es bueno robar, ni vender droga, ni que la gente se drogue. Yo no voy diciendo en mis canciones: "como me gusta el tabaco, es una maravilla". Yo no lo digo. Entonces, cuando hablo de esos delitos. Hablo de eso. Si tienen una necesidad real, roba. Y si tienes que darle de comer a tu hijo, roba o busca una salida mejor. pero cállatelo porque eso da vergüenza. Cuando te pillen, baja la cabeza y no lo vayas contando. Es patético.

P: Te vas ahora a Latinoamérica de gira, ¿no?

R: Sí, Me quieren muchísimo en México, Colombia, Argentina, Chile... La verdad es que siempre que hemos ido nos hemos sentido súper arropados. Y es muy bonito irte lejos de casa y encontrarte que estás en casa también. Es la hostia.