De paseo por el Jardín Botánico
- Más de 250 años promoviendo el conocimiento y el disfrute de las plantas.
- Conocemos miles de especies vivas y secas; al aire libre y bajo techo
El Paseo del Prado es parada obligada para todo aquel que venga a Madrid. Uno de los puntos destacados, aunque quizá no el más visitado, es el Real Jardín Botánico.
Este rincón, ubicado entre el Museo del Prado y el Parque del Retiro, es una auténtica caja de sorpresas que les hemos dado a conocer en 'España Directo'.
Les hemos mostrado su herbario, su archivo, la 'estufa', recorremos sus tres terrazas y damos cuenta de las miles y miles de especies que convierten a este lugar en un referente mundial de la Botánica.
Más de dos siglos de historia
El Jardín Botánico fue inaugurado por Carlos III, aunque su sede actual es unos años posterior. Diseñada por el arquitecto real Francesco Sabatini y por el autor del Museo del Prado, Juan de Villanueva, fue inaugurado -a fines del s.XVIII- por Fernando VI.
Hoy en día, además de un rincón para el paseo y la contemplación en pleno casco urbano, es un centro de investigación perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
En su interior encontramos más de cinco mil especies diferentes de árboles y plantas que proceden de todos los puntos del planeta ya que desde su fundación, el Jardín intercambia semillas con otras instituciones del mundo.
La calidad de su colección llevó a su reconocimiento en 2002 como Gran Instalación Científica de Ciencias Naturales.
Los bonsáis de Felipe González
El Jardín se puede visitar tanto de forma individual como con guía.
Además es frecuente encontrar en su calendario, programas educativos y de ocio tanto para niños como para adultos. Una de las colecciones que más llama la atención a los visitantes que no son profesionales de la ciencia es la colección de bonsáis que el ex Presidente Felipe González donó a la Institución a su salida de la Moncloa.
Podemos encontrar, en miniatura, arboles autóctonos como alcornoques, tejos, sabinas, bojs, madroños, encinas o hayas. También autóctonos, con especies procedentes de países como China, Japón o Canadá.