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Aquellas primeras veces... 50 años persiguiendo a The Rolling Stones en concierto

Por
rolling stones 50 años
De izquierda a derecha, los cuatro Stones: Ronnie Wood, Keith Richards, Mick Jagger y Charlie Watts.

Ayer era otro mundo. Y hoy es otra cosa. En la actualidad -y quien dice eso pongamos que lo hace situando el kilómetro cero allá por los 80's- no hay artista gordo que se precie que no incluya España en su gira de presentación de su último álbum.

Porque desde entonces, desde aquella primera vez, ¿cuántas veces no habremos visto a los Stones? Con tal o cual disco de actualidad (no nos engañemos, cualquier tiempo pasado fue mejor y al fin y a la postre el set list pasa de puntillas por el trabajo recién editado, porque sus "satánicas majestades" lo que saben es que el personal se va a desconyuntar e imitar el "cadereo" de Jagger cuando suene "Satisfaction" o cualquier clásico coétáneo) siempre han fichado en este país y cuando el destino es Madrid han aterrizado en el estadio Vicente Calderón (ejem, hagamos patria rojiblanca), como no podría ser de otra forma.

Stones en rojo y blanco

Por utilizar de nuevo la conexión con el mundo del balón podría referirme a aquellos fastos del Mundial 82 en el que nosotros (España) poníamos canchas y el mundo futbolístico miraba a nuestro país y los italianos se llevaron el galardón para casa.

En lo que rodeaba a la cita de la pelota había acontecimientos paralelos y uno de ellos -bueno, dos- eran sendos conciertos en el campo de mi Atleti. Para la posteridad pasó el día del intenso jarreo de agua (con catarata de fotos capturadas ese día con Mick cantando bajo la lluvia), pero el otro concierto fue asimismo memorable (eso sí, sin los elementos acompañando y ofreciendo efectos especiales tormentosos).

La primera vez

Pero, claro, la primera vez siempre deja huella. Y como el primer concierto en el que más a mano teníamos de los Rolling Stones en España era en Barcelona allá por el 11 de junio del 76... para Barcelona que nos fuimos. Colas kilométricas que daban la vuelta a la Plaza de Toros (la Monumental) y alguna que otra escaramuza a la entrada, dentro del propio recinto y a la salida (no olvidemos que el año anterior en el calendario fue en el 75).

Inolvidable el momento en que, a los acordes del "Honky tonk women", Jagger, Richards, Wyman, Watts y el recién incorporado Wood, arrancaron una tanda de canciones que llegaron hasta la veintena y con paradas obligadas en algunas de las piezas de lo que era el disco que había salido unos meses antes (Black and blue) y que algunos puristas stonianos de la primeriza época Decca no acababan de pillarle ese ramalazo funk, negro y derivaciones que se exhibían en canciones tan carnosas o cimbreantes como "Hot stuff" o "Hey negrita" (el single de avance fue "Fool to cry").

Un directo aplastante

Después de que Jagger se subiera al estrado que ocupaba en la izquierda del escenario el mago de las teclas Billy Preston para interpretar un número de baile, el remate a la jugada fue demoledor (del sudoroso "Midnight rambler" al "Luchador de la calle" pasando por "It's only rock and roll", "Brown sugar" y "Jumpin jack flash"). Ufff!!! Aplastante.

Medio siglo de vida de la banda de rock más importante de todos los tiempos. Tuvo que pasar un tercio (14 años) para saborear su directo por primera vez.

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