Adiós a la indiscutible reina del 'disco', Donna Summer

• Falleció en Florida a la edad de 63 años víctima de un cáncer de mama
• Su "Love to Love You Baby" encarnaba los nuevos modos derivados del soul
• Una de sus últimas apariciones fue en 2009, en la entrega del Nobel a Obama

Aunque Donna Summer había desaparecido hace ya mucho tiempo del Olimpo donde una vez fue coronada indiscutible reina de la 'disco music' (mal que les peses a Gloria Gaynor o a la mismísima Diana Ross), aún seguía en activo facturando ocasionalmente discos cercanos al mainstream de la música negra más cercana al AOR.

Nacida en el gospel

Nacida LaDonna Adrian Gaines el 31 de diciembre de 1948 en Boston, Donna Summer hizo sus primeros pinitos musicales en el gospel, como tantas figuras de la música negra.

A final de los años 60 viajó a Europa para actuar en varios musicales y se casó en Alemania con un actor austríaco llamado Helmuth Sommer (de quien retendría el apellido tras divorciarse). Alli entró en contacto con el productor Giorgio Moroder, una vieja gloria del pop teutón reciclado en prestigioso productor de la entonces emergente disco music europea.

La apoteosis disco

Patrocinada por Moroder y por su compinche Pete Bellote, Donna arrasó en las listas de medio mundo con una pieza incendiaria titulada "Love to Love You Baby", que encarnaba los nuevos modos de la música negra derivada del soul: ritmos abrasivos y extenuantes, desarrollos larguísimos (en su versión maxi duraba más de 17 minutos) y un lenguaje sexualmente explícito como no se había escuchado hasta el momento fuera de los circuitos underground negroamericanos (la revista Time llegó a contabilizar hasta 22 orgasmos simulados por los gemidos de la cantante, que grabó el tema en semipenumbra para ambientarlo con mayor intensidad).

Cristiana renacida

Enseguida llegaron nuevos éxitos en la misma línea ("I Feel Love", "Hot Stuff", "Bad Girls") y pronto, los coqueteos con el pop, escenificados en su celebrado dueto con Barbra Streisand ("On The Radio"). A principios de los años 80, Donna Summer abandonó el tutelaje de Moroder y Bellote, fichó por el sello Geffen y apostó por el pop-soul ("The Wanderer", "She Works Hard For The Money").

Cristiana renacida, renegó de su pasado musical, grabó algunos discos de gospel (como la otra diva de la música disco, Gloria Gaynor), llegando a anunciar que nunca volvería a interpretar "Love to Love You Baby", promesa que rompería tiempo después.

Alejada de los escenarios debido al cáncer que finalmente ha terminado con su vida en la mañana del jueves, una de sus últimas apariciones públicas fue en diciembre del año 2009, cuando cantó en Oslo, en la ceremonia en la que Barack Obama recibió el Premio Nobel de la Paz.