The Smashing Pumpkins arrasan en Madrid con su repertorio de éxitos de los noventa
- Billy Corgan fue adorado por un público que recibió entusiasmado a la banda
- “Tonight, tonight” o “Zero” estuvieron entre las canciones más coreadas
The Smashing Pumpkins
Sala Arena (Madrid), 24 de mayo de 2012Sala Arena (Madrid), 24 de mayo de 2012
1. Black diamond
2. Zero
3. Bullet with butterfly wings
4. Today
5. Starla
6. The beginning is the end...
7. Quasar
8. Panopticon
9. Tonight, tonight
10. Ava adore
11. Neverlost
12. The everlasting gaze
13 y 14. Oceania
15. 1979
16. Cherub rock
17. Muzzle
18. Disarm
19. Space Oddity
20. X.Y.U.
21. Black diamond
Le dolían las manos, había cumplido con las dos horas de concierto o simplemente tenía ganas de irse. Billy Corgan, 45 años, hombre de dimensiones inabarcables, no sabía cómo abandonar una Sala Arena que pedía más al artista que daba por terminados los bises. The Smashing Pumpkins han desatado al público madrileño en una noche con muchos de los éxitos de la banda, que ha ofrecido un directo incontestable.
Es cierto que se echa de menos a D'Arcy. También es cierto que lleva más de una década alejada del grupo. Tampoco están Iha ni Chamberlain. Ni siquiera los salvajes rizos de la Melissa Aur Der Maur que les acompañó en la gira de Machina. A primera vista, los nuevos compañeros de Corgan no tienen el carisma que se espera de The Smashing Pumpkins. Sin embargo, la calidad es absoluta.
Catarata de hits
Empieza el concierto sorpresa igual que termina: con un tema que suena más a Sabbath que a Corgan y que interpreta el batería. El líder de la banda que quizá más éxitos rock facturó en la década de los 90 se aparta a un lado al principio de un recital en el que se colaron seguidas “Zero”, “Bullet with butterfly wings” y “Today”.
Con el público a sus pies, es hora de testear las nuevas canciones de Oceania (que publicarán en junio) y adornarlas con los infinitos solos de guitarra de un Billy que todavía hoy disfruta como un niño con “Ava Adore”, “The everlasting gaze” y una de las joyas de la corona, “Tonight, tonight”.
Los años 90 versus la era Oceania
Se hace raro ver a una bajista que viene a ser una réplica elegante y con el pelo oscuro de D'Arcy. A ratos el concierto se hace un poco largo y las nuevas canciones del grupo (algunas con su líder acariciando un sintetizador con sus gigantes dedos) no llegan al público como se podría esperar. Pero ahí está el dios Corgan, olvidada su sotana de las últimas giras, con una guitarra colgada que parece hecha en miniatura y con el descaro suficiente para pedir que nos compremos Oceania.
No queda claro si The Smashing Pumpkins se han echado a la carretera para recaudar fondos, promocionar su nuevo trabajo o transportarnos al año 1996. En todos los casos, funciona. Cómo no rendirse ante “1979”, “Cherub rock” o los bises con “Disarm”, “X.Y.U.” y esa cover del maestro Bowie, “Space oddity”, en su versión más eléctrica.
A estas alturas, Billy Corgan ha aprendido en qué momento hay que tirar de los clásicos en el caso de que fallen (falten) las nuevas (buenas) canciones. No tiene que preocuparse el genio por sus calabazas, sabiendo que, al final, todo vuelve: “The beginning is the end is the beginning”.