"A Sorolla le apasionaba la decoración y la moda"
- Asegura Covadonga Picarch, la conservadora del Museo Sorolla
- Tal día como hoy hace 151 años nació el pintor valenciano
El 27 de febrero de 1863 nace en Valencia Joaquín Sorolla, representante destacado del impresionismo y de la aplicación directa de la luz al paisaje y la figura. Uno de los pintores más importantes de finales del siglo XIX y principios de siglo XX en España. Se cumplen 151 años y el programa Esto me suena. Las tardes de Ciudadano García ha querido acercarse a su figura de la mano de Covadonga Picarch, conservadora del Museo Sorolla.
Sorolla murió con 60 años. Enfermó 3 años antes por un ictus y tuvo que dejar de pintar, pero según Picarch "murió como un triunfador en todo el mundo". Tuvo un éxito tremendo en París y Estados Unidos. Su último encargo, la serie para la Hispanic Society of America, costó 150.000 dólares de la época en 1911.
La conservadora nos desvela una de sus facetas menos conocidas: "Era amante de la moda y hacía dibujos de los vestidos y los sombreros que veía en sus viajes y después se los enseñaba a su mujer para que estuviera a la moda". Picarch explica que Sorolla se caracterizaba por dos cosas: el amor a su mujer, que se refleja en las cartas que le enviaba que "son divertidísimas" y la necesidad de pintar, "pintó practicamente todos los días de su vida".
El Museo Sorolla
"Sorolla vive una época de gran interés", asegura Picarch. Muestra de ello son las cotizaciones de los últimos 'sorollas' vendidos entorno a los 3-4 millones de euros y también la buena salud de la que goza su museo "recibe 200.000 visitantes al año". Una de sus mayores virtudes para su conservadora es su tamaño: "es fantástico para pasar una hora y después seguir haciendo cosas por el centro de la capital".
Para quienes no lo conozcan, el Museo Sorolla es un palacete de estilo francés construido a principios del XX en Madrid donde vivió Sorolla y su familia y donde el pintor creó la mayor parte de su obra Lo primero que te encuentras al entrar es un jardín neomusulmán con fuentes, cerámicas, figuras de excavaciones arqueológicas y sus fantásticas rosas antiguas. La casa conserva los talleres, la cocina con sus muebles y la zona donde Sorolla recibía a las visitas, entre ellas el Rey Alfonso XIII y personalidades de la cultura nacional e internacional de la época. Cuenta Picarch que "el propio Sorolla se encargaba de la decoración de la casa". Compraba los muebles en sus viajes y los enviaba a Madrid. Como las lámparas de Tiffany que compró al hijo del joyero en su segundo viaje a Nueva York. Hay una parte de la casa que se mantiene intacta, conforme a las fotografías de 1927, pero la planta superior, la zona de habitaciones de la familia Sorolla y el cuarto de costura, se reconvirtió en una galería con exposiciones temporales. Actualmente se puede ver Fiesta y color. La mirada etnográfica de Sorolla que se mantendrá hasta el 25 de mayo.