'El lago de los cisnes' con una joven compañía de San Petersburgo
- Batalov, solista del Mariinskiy es director y fundador del Ballet St. Petersburg
- Leonid Sarafanov, una de las figuras más interesantes de la danza actual, solista invitado
- Durante el mes de julio en el Teatro Compac Gran Vía de Madrid
Andrey Batalov terminó su formación en 1992 en la Academia de Ballet de St. Petersburgo “Vaganova”, entre 1992 y 1994 fue solista del Ballet del Teatro Mikhailovskiy de St. Petersburgo y desde 1994 y hasta la actualidad es solista principal del Ballet Mariinskiy. También fue solista del Real Ballet Danés (2000-2002).
Su figura ya esta reconocida a la altura de los leyendarios artistas como Baryshnikov, Nizhinskiy...
Su repertorio incluye los papales principales en “La Sílfide”, “Descanso de Caballería”, “El Corsario”, “Don Quijote”, “La Bayadere”, “Manon”, “Sherezade”, “Romeo y Julieta”, “El Lago de los Cisnes”, “Giselle” y en los ballets modernos con las coreografías de Peter Martins y Kevin O’Dail.
Batalov bailó con las mejores bailarinas del Mariinskiy Ballet: Altynay Asylmuratova, Diana Vishneva, Uliana Lopatkina, Elvira Tarasova y con Nadezhda Pavlova (Ballet Bolshoi de Moscú)
El Ballet Clásico de St. Petersburgo, compañía fundada por el solista principal de Mariinskiy Ballet Andrey Batalov presenta El lago de los cisnes en el Teatro Cofidis.
Aunque la coreografía de Ivanov y Petipa se ha visto en numerosísimas ocasiones y en diferentes escenarios, ésta es la oportunidad, ésta es una oportunidad de apreciar, a través de la adaptación de Batalov, el refinado planteamiento coreográfico de la llamada "escuela de San Petersburgo", como recalca a Radio Clásica, la productora que ha traído el montaje a España, Tatiana Solovieva.
Y también de conocer a una compañía joven, ésta fundada por Batalov, y que ha actuado en Milán o Zurich pero nunca hasta ahora en España.
Dos Sigfridos y tres Odette
En el papel del príncipe Sigfrido cuenta con las actuaciones del propio Andrey Batalov y Leonid Sarafanov, dos figuras destacadas de la danza internacional. Andrey Batalov bailará los días 2, 10 y 15 de julio, y Leonid Sarafanov los días 6 y 8 de julio.
Y en el de Odette-Odile, tres artistas: Maria Poludova, Oksana Bondareva y Radamaria Duminika, bailarina moldava que ha abierto su propia academia de danza en Madrid, junto a la Plaza de Castilla.
Aunque todos los coreógrafos introducen cambios, matices en un coreografía como ésta de Ivanov-Petipa que ya tiene dos siglos, hay cuadros o escenas que nadie se atrevería a modificar, explica la promotora Solovieva, "como el paso a dos del cisne negro o el acto blanco".
Seria a juicio de ella, como "retocar un cuadro de Rembrandt".
En cuanto al final, ellos, como se hacía por otras razones en la extinta Unión Soviética -donde el final trágico estaba prohibido- nos van a ofrecer el final feliz.