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'El hombre que empezó a correr', el documental solidario de Ibon Cormenzana

  • El productor es el protagonista de una historia de superación personal
  • El objetivo es recaudar fondos para construir pozos de agua en Etiopía

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Las mañanas de RNE - 'El hombre que empezó a correr', el documental solidario de Ibon Cormenzana

Ibon Cormenzana ha producido cintas como Blancanieves (Pablo Berger), Blackthorn (Mateo Gil) o No llores, vuela (Claudia Llosa) y ahora ha decidido ponerse delante de la cámara por una buena causa: recaudar fondos para paliar la falta de agua en Etiopía, además de formar a nuevos agricultores y escolarizar a los niños del país.

"Ya hemos conseguido 120 pozos, con 120.000 euros", ha asegurado Cormenzana en Las mañanas de RNE. "Se les da un curso de agricultura y herramientas y semillas para poder plantar cuatro veces al año en lugar de una como hacían hasta ahora. Así tienen comida de sobra, pueden comprar uniformes y material para el colegio, las niñas no tienen que caminar kilómetros para conseguir agua, con el riesgo de violación que corren".

El productor cinematográfico protagoniza una película documental sobre corredores, una historia real de superación y sueños en la que avanza hacia una meta. Pero sobre todo, El hombre que empezó a correr, dirigido por Josep Serra, es un proyecto social.

Una familia junto a un pozo en construcción gracias al documental 'El hombre que empezó a correr'

Una familia junto a un pozo en construcción gracias al documental 'El hombre que empezó a correr' rne

Su primera idea era ayudar a un equipo de jóvenes atletas etíopes, construirles una pista de atletismo para que dejaran de entrenar en miserables condiciones. Pero surgieron complicaciones: "Vimos que había muchos tejemanejes y que el dinero que les íbamos a dar no iba a ir a parar a donde tenía que ir".

Con este proyecto fallido y habiendo conocido a Lourdes, una misionera que llevaba muchos años trabajando en el tema de los pozos en el norte de Etiopía, decidió enfocar el proyecto en este objetivo, ya que la falta de agua supone un grave problema en el país africano. "Si nosotros vivimos en el nivel 9,8 de riqueza, allí están en el 0,2. No tienen electricidad ni nada, todo se hace manual, así que la manera de sacar el agua también lo es, cogen sus cantimploras y botellas y de ahí van regando".

Durante un año y medio a Ibon Cormenzana le ha seguido una cámara y en el documental se ve al productor entrenando para poder correr en el ultra-trail del Montblanc, la mítica y dura carrera que atraviesa Francia, Italia y Suiza. "Al final es más la cabeza que el cuerpo, obviamente tienes que tener un entreno y durante un año casi entrenaba corriendo 20 horas a la semana, pero lo fundamental es la mente".

Todo lo que le ha ocurrido en este proceso, incluído un aparatoso accidente de moto que paralizó sus entrenamientos, se puede ver en el documental. "Dicen que el momento más divertido de la película es que se ve como me meten en el quirófano y cuando me están metiendo suero y anestesia estoy muy divertido, parece", bromea.