Icíar Bollaín: "'El olivo' es una historia universal que toca por todos lados"
- La cineasta estrena este viernes su nueva película
- Retrata la tala de árboles milenarios en España antes de la crisis
Antes de que comenzara la crisis económica, muchos árboles milenarios de España se arrancaron para vender por todo el mundo. Una cruda realidad que recoge Icíar Bollaín en su nueva película, El olivo, que se estrena este viernes en el cine.
La cinta, que cuenta con la participación de TVE, narra la historia de Alma (Anna Castillo), una joven de un pueblo del interior de Castellón que quiere mucho a su abuelo, quien lleva años sin hablar. Ahora que ha decidido dejar también de comer, Alma se obsesiona con recuperar el olivo milenario que la familia vendió contra su voluntad hace 12 años.
Para ello, sin un plan y sin apenas dinero, Alma embarca a su tío (Javier Gutiérrez), arruinado por la crisis; a su compañero de trabajo Rafa (Pep Ambrós); a sus amigas y a todo su pueblo, en la tarea encontrar el olivo replantado en algún lugar de Europa, y traerlo de vuelta a la masía familiar.
"La película toca por distintos lados", ha explicado la directora en Las mañanas de RNE. "La hemos enseñado fuera y vemos que es universal, habla de tierra y todos tenemos tierra; y habla de relaciones como la de la nieta y el abuelo, los padres... y a todos nos toca, todos tenemos eso".
Anna Castillo, quien defiende su primer papel protagonista en el cine, ha asegurado que "ha sido una experiencia buenísima", debutar con Icíar Bollaín "y con estos compañeros tan maravillosos". "Quien vaya a ver la película se va a quedar con la historia del olivo, con otro trabajo superlativo de Icíar Bollaín y con la cara de esta actriz que es una erupción en el panorama cinematográfico español como pocas veces había visto", ha asegurado Javier Gutiérrez.
El guión es de Paul Laverty, quien se quedó "perplejo" al leer la noticia de uno de estos olivos milenarios "que arrancaron para vender a alguien con dinero al norte de Europa", ha explicado la cineasta.
Manuel Cucala y Miguel Ángel Aladrén completan el reparto de esta película que también es una oda al inconformismo y un grito a la lucha por conseguir lo imposible.