Escuchar a los menores víctimas de violencia de género
- En primera persona pide que sus testimonios sean tenidos en cuenta
- También denuncia la falta especialización en los juzgados
Llego a una jornada sobre violencia de género que organiza Sevilla Acoge, pero centrada en los menores que son víctimas directas del maltrato. Son niños que sufren en silencio y quedan traumatizados si no se les escucha o no se toma en serio su testimonio. Los niños no mienten, tienen voz, y el deber de los profesionales que ayudan en estas situaciones o toman decisiones sobre la vida de estos menores, como los jueces de lo penal que dictan sentencias, tienen la obligación de responder a las necesidades que los niños y niñas manifiesten. Las leyes existen y los protegen, hay que aplicarlas teniendo en cuenta el testimonio de los menores. Hay que profesionalizar y formar en violencia a los juzgados de lo penal.
Tras conversar con diferentes profesionales presentes en las jornadas, desde el grupo de policía DIANA en Sevilla (teléfonos de contacto: 954473980 y 625150636), la coordinadora del juzgado de violencia de género, Amalia Calderón, una psicóloga o mujeres que junto a sus hijos han sido víctimas de violencia de género, la conclusión es que falta especialización en los juzgados, sobre todo, pero también en otros ámbitos de la administración sobre este tema. Conocer qué es la violencia y lo que implica para sus víctimas es fundamental para poder hacer justicia de verdad.
Porque se supone que el hogar, en el ámbito de lo privado, es donde los menores se deben sentir más protegidos, más seguros. Sin embargo, es donde pasan más miedo y donde se viven las situaciones más terribles. Escuchamos testimonios terribles que marcan para toda la vida a estos jóvenes. Los niños y niñas que tienen la desgracia de presenciar o de sufrir situaciones de maltrato merecen de un cuidado y un apoyo psicológico especializado. Son niños, pero saben de lo que hablan cuando relatan estas vivencias, su testimonio debe ser respetado y tenido en cuenta. De lo contrario, pueden reproducir patrones como los que han vivido. ¡Su voz cuenta y mucho!
Recuerdo que el teléfono de atención a los malos tratos y que no deja rastro es el 016.