"Aquí vivo en paz y sin miedo. Nos hemos ido por nuestros hijos"
- En primera persona nos acerca a un taller teatral con refugiados
- El objetivo de la iniciativa es derribar los prejuicios sobre estas personas
Me acerco a la asociación sevillana Tararíquetevi Teatro, que está en el barrio de Triana, porque es el primer día de ensayo de muchas personas refugiadas, familia también, que participan del proyecto NICeR, financiado por el Fondo de Asilo e Integración Europeo (FAMI) para fomentar la integración de estas personas en su entorno a través del teatro.
Un proyecto que en nuestro país se coordina desde la Fundación Juventud y Cultura conjuntamente con organizaciones como CEAR, Cepaim, Cruz Roja y Accem y se replica en barrios y ciudades europeas con problemática migrante como Molenbeck en Bruselas, Liverpool, Roma, Berlin, Timisoara y Nicosia, entre otros. En España los talleres se imparten en la capital andaluza, donde vamos a conocer las historias de estos luchadores por una vida sin miedo.
Hay personas llegadas de todo el mundo, de lugares muy lejanos como Afganistán, China, Ucrania, Palestina o Venezuela. Pero todos vivían con miedo. Las circunstancias eran distintas, pero tenían claro que tenían que emigrar, dejar allí a amigos, familia, recuerdos. A todos ellos les une su valentía para atreverse a decir adiós al pasado y enfrentarse a un futuro incierto pero lleno de esperanza.
Muchos llevan apenas unas semanas entre nosotros y se han apuntado voluntariamente a este proyecto con la idea de integrarse con los vecinos y asistentes españoles al taller y fomentar el encuentro entre unos y otros. Este es el objetivo del proyecto en todos los países donde tiene lugar: derribar los prejuicios que pueda haber hacia las personas refugiadas, compartiendo con ellos y con ellas, conociéndose mutuamente. Dándoles la oportunidad a los recién llegados de contar sus experiencias, su viaje interior también y todo lo que implica tomar decisiones como la de pedir refugio en otro país porque temes por tu vida y la de tu familia.