Camino de Santiago: un mapa milenario
- Lo recorremos junto al peregrino Álvaro Lazaga y el escritor Manuel Rodríguez
- Con Miriam Díaz-Aroca recordamos los Goyas de Belle Époque en 1993
El Camino de Santiago podría batir este año un nuevo récord histórico, alcanzando los 300.000 peregrinos que a lo largo de este 2017 han completado esta senda milenaria.
Una estadística que se corresponde con la enorme popularidad que la ruta ha ganado en los últimos tiempos, especialmente desde 1993, cuando se oficializó su declaración como Patrimonio de la Humanidad.
En este nuevo Memoria de delfín, analizamos el origen y evolución de este fenómeno religioso, reconvertido en experiencia cultural y espiritual. María Neira, coordinadora de la Oficina del Peregrino en Santiago de Compostela, nos cuenta que “más del 90% de las personas hacen el Camino a pie, aunque el segundo medio más utilizado es la bicicleta”; que en un 60% de los casos, la franja de edad se encuentra entre los 30 y los 60 años y que, pese a que cada vez se buscan más itinerarios alternativos, que repasamos con Sonia Castelani, un 63% de los peregrinos realizan el Camino Francés.
“Ese es el Camino de los Caminos, porque antiguamente recogía a todos los peregrinos que venían de Europa”, apunta nuestro segundo invitado, Manuel Rodríguez, periodista, escritor, y uno de los más reconocidos estudiosos del tema, que interviene desde RNE Santiago. Con él descubrimos, además, que históricamente la entrada a la catedral se hacía por la plaza de la Azabachería.
En primera persona habla Álvaro Lazaga, peregrino con 30 Compostelas cosechadas en los últimos ocho años. 20.000 kilómetros llenos de coincidencias, de amistades y de buenos momentos. “Llegando a Finisterre, hace unos días, coincidí con un alemán con el que había estado dos años antes”, comenta a Arturo Martín desde RNE Alicante.
A 1993 volvemos con Miguel Ángel Hoyos para rescatar otros acontecimientos, como el terrible hallazgo de las niñas de Alcàsser, la caída del narcotraficante Pablo Escobar o el tercer tour de Indurain.
En esta fecha, paralelamente, la película Belle Époque se alzaba con nueve Goyas, sin saber que un año más tarde se llevaría el Óscar a mejor película de habla no inglesa. Por la alfombra roja se paseó Miriam Díaz-Aroca, Clara en el film de Trueba. Con ella revivimos aquel mágico momento y un terremoto en la víspera que, parece, les dio suerte. “Siempre que nos encontramos, brota un vínculo mágico, único”, subraya, en referencia al resto del reparto.
Mientras tanto, como recuerda Alberto Maeso, llegaba La máquina de la verdad a Telecinco con Julián Lago y ¿Qué apostamos? a La 1 con Ramón García y Ana Obregón.
Y en la industria musical, completa Juan Otero, irrumpía el disco en solitario de Mick Jagger, Wandering Spirit, y los trabajos de Melisa Etheridge, Texas y Gipsy Kings.