¿Cómo acabar con la reventa de entradas?
- La venta de entradas para el concierto de U2 en Madrid reabre este debate
- En Las mañanas de RNE lo han analizado con distintos sectores implicados
Los irlandeses U2 darán un segundo concierto en Madrid el próximo 21 de septiembre después de que las 16.000 entradas que pusieron a la venta el pasado viernes se agotaran en cuestión de minutos, costaban entre 35 y 195 euros, pero se agotaron en apenas 10 minutos. No es la primera vez que ocurre, así que Bono y compañía, aunque de forma involuntaria, han reabierto el debate sobre la reventa. Por cierto, las suyas, las de U2, cuestan más de 900 euros. Lo que ha hecho saltar todas las alarmas.
Las quejas han llegado hasta el Ministerio de Cultura. Iñigo Méndez de Vigo ha pedido a su homólogo de Interior, Juan Ignacio Zoido, que se investigue. Una investigación que aplauden desde Ticketmaster, una de las principales empresas del sector.
De la reventa, de su legalidad y de las posibles soluciones para atajarla, han hablado en Las mañanas de RNE con distintos sectores implicados. En el debate han contado con Eugeni Calsamiglia, presidente de Ticketmaster en España; Jorge Ruiz, líder de Maldita Nerea; y Neo Sala, fundador y presidente de Dr.Music, que a lo largo de su carrera ha trabajado con grandes como Michael Jackson, Bruce Springsteen, Leonard Cohen o Tina Turner.
Ahora ha sido U2, pero antes ocurrió con Bruce Springsteen. En aquella ocasión, denuncia FACUA, Ticketmaster desvió las entradas al portal de reventa Seatwave. Ambas empresas forman parte de la gran estructura de Live Nation, la mayor promotora de conciertos del mundo. Hace tiempo los promotores anunciaron que acudirían a los tribunales, pero lo cierto es que hay un vacío legal. En la inmensa mayoría de comunidades, que son las que tienen las competencias, la ley sólo prohibe específicamente la reventa en la calle porque no se ha actualizado desde 1982.
Algunas comunidades han movida ficha. Es el caso de Cantabria cuya legislación considera una falta grave la reventa de entradas masiva y con carácter lucrativo y la sanciona con hasta 30.000 euros.