Josefina Carabias, una pionera de la pluma periodística
- Fue la primera mujer en ejercer la profesión de periodista en España dentro de una redacción
- Su historia se recoge en el libro Voces de mujeres: periodistas españolas del siglo XX nacidas antes del final de la Guerra Civil
Decía Josefina Carabias, una de las primeras mujeres en trabajar en la redacción de un periódico, que “escribir es una cosa muy fácil, lo difícil es hacerse leer”. Dos tareas que, a lo largo de su profesión, esta pionera del periodismo superó sin ningún problema.
Sobre su periplo profesional y vital habla Bernardo Díaz Nosty en el libro Voces de mujeres: periodistas españolas del siglo XX nacidas antes del final de la Guerra Civil. Un trabajo que pretende rescatar del olvido a muchas de esas periodistas, porque la profesión como la conocemos hoy no se puede entender sin las pioneras. Una de sus protagonistas es Pepita, como la llamaban su familia y sus amigos, nacida en el seno de una familia de terratenientes, en Arenas de San Pedro (Ávila).
Desde muy joven mostró un carácter decidido, tanto que aún con el rechazo de su familia consiguió formarse, se hizo socia del Ateneo y licenciarse en bachillerato y más tarde en derecho en el año 1930, algo que pocas mujeres lograban en aquella época. “Aquello fue el gran disgusto de la familia”, contó años después la hija de Carabias. Los estudios tampoco impidieron que se divirtiese. Asistía al teatro, se cortó el pelo a lo garçon y bailaba el charleston en los café-concert.
¿Cómo nació su vocación de periodista?
Un primo de Josefina Carabias, Vicente Sánchez Ocaña, dirigía en aquellos años la revista Estampa, y pidió a Pepita, un año después de que se licenciase, que le escribiera unos folios sobre las mujeres en la Universidad. En aquella época, la Estampa era uno de los semanarios con más tirada en España, vendía más de 200.000 ejemplares. “Entonces una mujer escribiendo llamaba más la atención, además los artículos se publicaban con mi fotografía, y yo entonces era ‘monilla’, de modo que al ser una revista de tanta tirada me encontré periodista conocida en dos o tres meses”, recordaba la propia Josefina en una entrevista a Radio Nacional recogida desde el Archivo de RTVE para la sección En algún lugar del tiempo, de Luis Zaragoza.
Josefina tuvo que empezar a lidiar con la fama. Contaba que los sábados, que era cuando se publicaba la Estampa, no quería coger el tranvía por si al reconocían. En 1932 presenta el diario hablado de la mañana en la SER, y en 1936 se casa con José Rico Godoy, hijo de un notario almeriense que participó en el levantamiento de Jaca. Con el inicio de la Guerra Civil ambos deciden irse a Paris.
Periodismo durante la dictadura
Regresaron años después a una España completamente distinta y con José Rico Godoy está inhabilitado para ejercer ninguna actividad económica. Josefina Carabias tampoco puede reintegrarse a su profesión y escribe libros bajo el seudónimo de Carmen Moreno. Con el tiempo retomaría su profesión en el diario Informaciones, pero siempre bajo seudónimo durante la dictadura. Con todo nunca dejo de sacudir la dictadura de costumbres y reivindicar a la mujer libre.
Cuando Informaciones la envía a Estados Unidos como corresponsal, se convierte en una de las primeras mujeres en serlo y su carrera vuelve a despegar. En 1958 firma por el diario Ya y la envían a París. Regresa en 1967 y bajo el título Escribe Josefina Carabias publica a diario durante 13 años unas crónicas que son el repaso a la España de esos años. Cubre la transición en el Congreso. Muere en 1980.