Un giro inesperado: la aparición de Tony King da un vuelco al caso Wanninkhof
La detención de King se produjo pocas semanas antes de que se iniciara el nuevo juicio
Su ex-mujer había acudido a las policía tras el asesinato de Sonia Carabantes
Scotland Yard alertó de que era una "amenaza potencial para las mujeres de España"
Fue condenado a 10 años de prisión en Inglaterra por intentar estrangular a cinco mujeres
En el verano de 2003, una nueva desaparición conmocionaba la Costa del Sol. La joven Sonia Carabantes, de 17 años, desaparecía el 14 de agosto después de ser vista por úlitma vez a las cinco de la mañana en la Feria de Coín. Cinco días después, su cuerpo aparecía bajo un pila de piedras en el paraje conocido como El Pinar en Monda. No había sido violada y bajo sus uñas se encontraron restos de piel de su agresor. La autopsia determinó que Sonia había muerto estrangulada, no apuñalada como Rocío Wanninkhof. En los días posteriores a la aparición del cadáver Coín vivió un ambiente tenso, en el que se cruzaban las acusaciones sin fundamento contra algunos vecinos y feriantes. Una vez más, la acusaciones populares se movían a más velocidad que la investigación policial.
El inglés con dos nombres, su ex-mujer y una marca de cigarrillos poco común
El 1 de Septiembre de 2003 se produjo la noticia que daba un vuelco completo al Caso Wanninkhof. La Guardia Civil confirmaba que el ADN encontrado bajo las uñas de Sonia Carabantes coincidía al 99,99% con el ADN hallado en un cigarrillo de la marca Royal Crown que apareció junto al cadáver de Rocío.
El 18 de Septiembre Anthony Alexander King era detenido. Quedaban sólo unas semanas para que se celebrara el nuevo juicio contra Dolores Vázquez y esta detención parecía borrar de un plumazo su implicación en el asesinato. Aun así, Tony King acusó durante su juicio a Dolores Vázquez de ser la inductora del crimen.
¿Quién era Tony King?. Lamentablemente, un viejo conocido de la policía británica. Nacido Anthony Alexander Bromwich, fue encarcelado en su país en 1986 por estrangular hasta dejar inconscientes a cinco mujeres en el barrio de Holloway, al norte de Londres. Condenado a diez años de prisión, obtuvo la libertad condicional en 1991 aunque volvió a la cárcel por un robo a punta de pistola. En 1995 sale de prisión y se acoge a un programa de la justicia británica que permite a los criminales cambiar de apellido si su imagen ha aparecido en la prensa. "El estrangulador de Holloway" comenzaba una nueva vida como Tony King.
El destino elegido por Tony King para empezar desde cero fue la Costa del Sol. Allí se traslada con su mujer Cecilia en 1997 y comienza a realizar distintos trabajos como camarero y empleado de una agencia inmobiliaria. Un año después de su llegada a España la Interpol pide que se localice a Tony King para comprobar que se encuentra en nuestro país. Scotland Yard sospecha que intentó violar a una estudiante antes de huir y advierte de que es "un peligro potencial para las mujeres de España". Pero las fuerzas de seguridad no tuvieron en cuenta a este agresor sexual hasta que Cecilia le denunció, tras el hallazgo del cadáver de Sonia Carabantes en 2003.
Cecilia, quien se había separado de King en 1999, llamó a la policía británica para comunicarles sus sospechas. La noche de la desapirición de Sonia Carabantes, King llegó a casa de Cecilia con arañazos en la cara y sangre en sus ropas, contando que había estado en la Feria de Coín. Scotland Yard recomendó a Cecilia que se pusiera en contacto con las autoridades españolas. Un policía anónimo escuchó el relato de la ex mujer de King y elaboró un informe que elevó a sus superiores, incluyendo los documentos sobre la doble identidad de King que había aportado Cecilia. La detención del británico era cuestión de tiempo.
Numerosas pruebas implicaban a Tony King en los asesinatos de Rocío y Sonia. Fumaba Royal Crown en la época del asesinato de Rocío (aunque posteriormente cambió de marca de cigarrillos) y su coche, un Mazda, encajaba con el trozo de tulipa manchado de sangre que se encontró junto al cadáver de Sonia. Pero esta vez las fuerzas de seguridad no querían dejar ningún cabo suelto. Dos agentes de la Guardia Civil entablaron conversación con King en el bar donde trabajaba y se hicieron con la colilla de un cigarrillo que King había fumado. De esa colilla se obtuvo la secuencia de ADN que terminaría por confirmar las sospechas de los investigadores.
El 19 de septiembre de 2003 Anthony Alexander King era detenido. Media docena de policías le tumbaron al suelo para reducirle. En el registro de los bienes del detenido se comprobó que el trozo de tulipa encontrado en el escenario del crímen de Sonia coincidía sin lugar a dudas con el vehículo del sospechoso. En un primer momento Tony King se autoinculpó, aunque en el juicio cambiaría su versión de los hechos implicando a terceras personas.
Justicia, ¿por fin?
"No le conozco de nada". Estas eran las palabras que Dolores Vázquez repetía una y otra vez en la rueda de prensa convocada el día siguiente a la detención de Tony King. No había vuelto a dirigirse a los medios de comunicación desde que saliera en libertad condicional en 2001. Ahora lo hacía con la convicción de quien ha estado defendiendo su inocencia durante cuatro años. "La muerte de Sonia ha abierto una luz para mí", afirmaba Dolores.
El de Sonia Carabantes fue el primer asesinato en ser juzgado, en 2005. Tony King fue condenado a 36 años de prisión por la muerte de la joven de Coín. Posteriormente sería condenado a siete años más de cárcel por el intento de violación de una joven en Benalmádena en 2001.
El 20 de Noviembre de 2006 comenzaba el juicio contra Tony King por el asesinato de Rocío Wanninkhof. El británico no dudó en acusar a Dolores Vázquez del crimen, llegando incluso a afirmar que la vio apuñalando a Rocío por la espalda. King nunca negó que estuviera presente en el lugar donde fue asesinada Rocío, pero también inculpó a Robert Graham acusándole de haber degollado a la joven malagueña. Las causas contra Dolores Vázquez y Robert Graham habían sido sobreseídas en 2005, tras la aparición en escena de Tony King.
En la tercera jornada del juicio los investigadores no dudaron en señalar a Tony King como autor único del crimen. En diciembre de 2006 un jurado popular declaró por unanimidad que Tony King era culpable del asesinato de Rocío Wanninkhof pero lo exoneró del delito de agresión sexual que no pudo ser probado debido al mal estado del cadáver cuando fue encontrado. La Audiencia de Málaga le condenó a 17 años de prisión y a indemnizar a la familia de Rocío con 294.000 euros. El británico se declaró inocente en el juicio y, pese a las distintas versiones que dio sobre el crimen, nunca negó que estuviera presente en el lugar donde fue asesinada Rocío.
Por desgracia, el juicio dejó algunas preguntas sin responder. La más evidente, ¿quién ayudó a Tony King a trasladar el cuerpo de Rocío al menos en dos ocasiones?. En la sentencia, el magistrado indica que el acusado, "en compañía de otras personas que habían estado presentes y que han quedado indeterminadas, arrastraron el cuerpo por un terraplén hasta una explanada". Posteriormente, se dieron a la fuga, pero regresaron para coger el cuerpo y trasladarlo hasta la zona de "Elviria" de Marbella, donde permaneció un tiempo hasta que "en fecha no determinada" lo depositaron en la urbanización "Altos del Rodeo", lugar en el que fue descubierto el cadáver el 2 de noviembre de 1999.
Se cerraba así el caso que más ha dado que hablar en España en los últimos años. También se despejaba la sombra de la duda sobre una mujer, Dolores Vázquez, que sufrió la peor cara de la justicia y un linchamiento mediático desconocido en nuestro país.