Los fans españoles animan a Lucía Pérez en el centro de Düsseldorf

• La candidata española recorrió este lunes la ciudad sede del certamen y se detuvo en el Burgplatz, donde la esperaban decenas de aficionados españoles

Lucía se reúne con sus fans

Continúa el periplo de Lucía Pérez en Eurovisión 2011, en el que cada vez gana más seguidores. El lunes, día un poco más relajado sin ensayos en el Düsseldorf Arena, recorrió con el equipo de TVE algunas zonas de la ciudad y pudo ver de cerca cómo cada vez más la gente conoce, apoya la canción y se sabe los pasos de la coreografía ideada por Lola González.

Coreografía bien aprendida

Si ya el sábado en el Euroclub, los fans de Lucía y del Festival demostraron conocer la canción y su coreografía, este lunes lo han vuelto a hacer. Ocurrió en el Burgplatz, donde Lucía compartió un rato con ellos. Unos momentos en los que no paró de firmar autógrafos, hacerse fotos, responder entrevistas de algunos medios y, cómo no, cantar.

En medio de la plaza Lucía y sus cinco acompañantes en el escenario –Sandra, Kristina, Amaury, Ginés y Nito- se pusieron a cantar, con Chema Purón a la guitarra, la canción íntegra de 'Que me quiten lo bailao'. Y después, incluso tuvieron tiempo para arrancarse por una de las canciones favoritas de los seguidores del festival, 'Vuelve conmigo', precisamente compuesta por Chema Purón y que quedó en muy buen lugar interpretada por Anabel Conde.

Visita por Düsseldorf

Antes de conocer la ciudad, Lucía tuvo una ajetreada mañana. Tras el ensayo privado con Lola y los bailarines, la cantante gallega fue a hacer una prueba de sonido porque anoche era una de las invitadas de la fiesta de Lena, ganadora del pasado año y que este año vuelve a repetir como candidata.

Y es que la delegación alemana invitó a unirse a su fiesta a todos los representantes que el pasado año le dieron '12 points' a la candidatura alemana, entre ellos España.

Pero antes, tiempo para recorrer las calles de Düsseldorf y ver la estatua del poeta Heinrich Heine, recorrer en autobús la calle de tiendas más famosa de la ciudad, deleitarse con los edificios diseñados por el arquitecto Frank Ghery, asomarse al Rin o subirse al edificio más alto de la ciudad, la torre de comunicaciones, de 240 metros.