La faja ha vuelto

• La faja ya no es una prenda de abuelas
• Olvídate de los corchetes y las cremalleras, ahora es una prenda sexy
• ¿Será una moda pasajera?

La faja vuelve a estar de moda

¿Pensabas que la faja era una cosa solo de tu abuela? ¡Quítate los prejuicios y abre tu mente! Aunque nunca pensáramos que iba a llegar este día, la moda es así y ahora lo más moderno es tener un par de fajas en tu armario ¿Quién tiene la culpa?

Hacerse millonaria vendiendo fajas

Suena a chiste, pero es real. En Estados Unidos, Sara Blakely tuvo una idea, crear una faja capaz de reducir el contorno de la mujer sin dejar marcas sobre la ropa. Invirtió todo sus ahorros, unos 5.000 dólares, en darle forma a su idea. Tras tocar muchas puertas sin demasiado éxito, decidió que necesitaba vender mejor su producto, pero sin gastarse un duro en publicidad. Se leyó varios libros de marketing y creó un logo simpático para su marca en el ordenador de un amigo.

“Convirtió sus 5.000 dólares en más de mil millones“

Varios años después ha sido la portada de la revista Forbes. Conviritió sus 5.000 dólares en más de mil millones y ahora mismo es una de las mujeres más ricas del planeta.

El fenómeno de la faja ha hecho confesar a las famosas. Sus perfectas siluetas lucen a las mil maravillas sobre la alfombra roja porque debajo de sus carísimos vestidos de alta costura hay una faja Spanx, la marca de Sara Blakely.

La moda de las fajas ha llegado a España

Encontrarse con un escaparate lleno de fajas en una tienda de moderna lencería es lo más habitual esta temporada. La faja ha vuelto a nuestros cajones ¿Por qué? ¿Por el éxito de una marca estadounidense? ¿Porque la recomienda Oprah Winfrey? ¿Porque hemos comido demasiado este invierno?

Gente y tendencias visita una lencería de las de toda la vida en Madrid. Lourdes, de Fajas Ruiz, lo achaca a que: "La ropa viene más ceñida que antes. Y aunque ahora la gente está más delgadita ahora, también es verdad que hay más obsesión por estar perfectas."

“No buscan reducir, sino estilizar“

Además aquellas prendas de doble tela, cremallera y corchetes no tienen nada que ver con los bodys y pantalones reductores de tejidos suaves de ahora: "Las fajas modernas reducen como mucho una talla. No buscan reducir, sino estilizar. Se trata de evitar los cortes: el de la braga, el de las medias y de las molletinas que nos salen con los años. Con una faja que llega hasta debajo del pecho queda todo limpio".

Pepa trabaja en una corsetería que lleva despachando fajas desde 1925. Dice que ha notado un aumento de las ventas últimamente, pero cree que se debe al cambio de estación: "Se vende algo más porque llega la primavera, la gente se quita el abrigo y quiere ir mejor puesta".

Su público más fiel sigue siendo la señora que ha llevado faja toda la vida y "que la gasta cada día". Pero es cierto que últimamente muchas chicas jóvenes se han acercado hasta la Corsetería La Latina, en busca de esa prenda que promete estilizar la figura: "La gente joven no se pone faja porque no la necesita. Solo la compra para ponerse un vestido ceñido un determinado día."

“ Fajas flojas y sin tirantes que llegan a ser incluso sexys“

Las chicas compran fajas flojas y sin tirantes que llegan a ser incluso sexys. Piezas muy bonitas y sensuales, pero que no sirven para la gente que realmente tiene un problema de sobrepeso porque no funcionan ni para vientres caídos ni para tripas demasiado grandes.

La faja, ¿una moda pasajera?

Veremos si las fajas aguantan en el escaparate seis meses más y con el cambio de tiempo siguen siendo una tendencia que busca imponerse en el mercado ¿Volveremos a encorsetar y a tener bien apretado nuestro cuerpo?