El Gordo de Navidad le cambia la suerte a las administraciones de lotería que reparten el premio

• Las administraciones agraciadas aumentan sus ventas y ganan en popularidad
• “Estamos desbordados”, dice un lotero que dio el Gordo en 2012
• Busca si te ha tocado un premio en el comprabador de la lotería de Navidad 

Vecinos de Alcalá de Henares celebran el Gordo de 2012 en la administración del Chorrillo.

El Gordo le cambia la vida a los ganadores, que reciben una lluvia de dinero, pero también a las administraciones de lotería que venden los décimos premiados y que observan como el "efecto lotería de Navidad" provoca que sus ventas y su popularidad se disparen.

Así lo confirman desde la administración número 12 de Alcalá de Henares (Madrid), que el año pasado vendió 160 series del Gordo y repartió más de 500 millones de euros entre los vecinos del modesto barrio del Chorrillo [ver especial lotería de Navidad 2012]

El 76.058 se transformó en el número de la suerte para esta pequeña administración, en la que en estas semanas previas al sorteo no hay un momento de pausa ante la avalancha de compradores.

"Desde que dimos el primer premio vendemos mucho más. El día uno de diciembre ya no me quedaban décimos y he tenido que pedir hasta seis veces. Estamos desbordados", cuenta a RTVE.es casi sin resuello, Javier Gutiérrez, el propietario del negocio.

Gutiérrez también asegura que dar un premio "gordo" siempre es muy positivo por la publicidad que reporta, ya que muchos ganadores le mandan clientes, aunque el dueño confiesa que desafortunadamente ellos no se quedaron con ningún décimo agraciado en el sorteo de 2012.

Pese al éxito en la facturación en esta administración alcalaína, los españoles gastarán en 2013 unos 65 euros en lotería de Navidad, una cantidad que se aleja mucho  de los 135 euros que se invertían hace un lustro, según datos de la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI).

"Recibimos muchos pedidos de compradores de fuera"

El sorteo de la lotería de Navidad también situó en el mapa a Grañén (Huesca), un pueblo de 1.300 almas, cuya única administración de lotería repartió íntegro el Gordo (58.268) por la comarca de los Monegros en 2011.

La concentración de millones provocó entonces situaciones curiosas como que en la cercana pedanía de Sodeto les tocara la lotería a casi todos sus habitantes.  Por este motivo, el periódico New York Times les dedicó un artículo y su historia dio la vuelta al mundo.

El pueblo de Sodeto: una historia de buena y mala suerte que se convierte en documental

"Fue un momento precioso yo estaba como en una nube, además, todo el mundo te abraza y te felicita", recuerda a RTVE.es, Pilar Azagra, la lotera de Grañén, a la que se le escapan las lagrimas de la emoción.

Azagra señala que ya desde el día siguiente al sorteo se multiplicaron por dos las ventas para la lotería del Niño. Dos años después, se les agotan los números y reciben muchos pedidos de compradores "de fuera" atraídos por la fortuna de esta administración.

La buena racha continúa ya que repartieron en mayo nueve millones de euros, el premio "gordo" de la lotería nacional.

“El día del Gordo todo el mundo te felicita“

No obstante, lo que más enorgullece a la lotera de Huesca es haber aportado su granito de arena para mejorar la vida de sus vecinos. "Muchos han hecho obras en sus casas con el dinero del premio", y cuenta como los gremios de la construcción tienen más trabajo y se ha impulsado la prosperidad en la comarca.

En Sort, colas de más de diez horas para hacerse con un décimo

Este empujón dinamizador no parece que le haga falta a la administración de lotería que más vende de todo el país. El aluvión de personas que se acercaron este pasado puente de la Constitución hasta la localidad de Sort (Lleida) para comprar décimos en La Bruixa d'Or causó colas de hasta diez horas de espera, según explicó el dueño del establecimiento.

Xavier Gabriel, titular de La Bruixa d'Or, aseguró que la demanda de dinero en efectivo desabasteció los cajeros automáticos de la comarca leridana del Pallars, según le comentaron algunos clientes que tuvieron que desplazarse a otros pueblos de la zona en búsqueda de dinero.