'La Tumba de Drácula', la resurrección del mejor cómic de terror
- Se reedita la mítica colección del vampiro de los años setenta
- Una obra maestra de Marv Wolfman, Gene Colan y Tom Palmer
- Un tebeo en el que debutó Blade, el cazador de Vampiros
Entre los lanzamientos de cómic más destacados de este 2015 destaca La Tumba de Drácula (Panini –SD Distribuciones), una serie de cuatro volúmenes que recogerá la mítica serie que la editorial Marvel dedicó al Señor de los Vampiros en la década de los años setenta. Y que, por primera vez se publicará en España en su formato original y en color, como fue concebida.
Un tebeo que probablemente sea la mejor versión del personaje de Bram Stoker y que está considerada como una obra maestra del cómic. Además de ser uno de los primeros tebeos de éxito protagonizados por un villano.
Sus responsables fueron el guionista Marv Wolfman y el excepcional dibujante Gene Colan, con la ayuda del entintador que mejor entendió su estilo, Tom Palmer. Un equipo de lujo que durante casi 70 números construyó una apasionante saga casi cinematográfica en la que asistimos a la resurrección del Rey de los vampiros en la década de los 70 del Siglo XXI y a su enfrentamiento con los descendientes de sus antiguos enemigos, Abraham Van helsing y Jonathan Harker. A los que pronto se uniría Blade, el famoso cazavampiros.
Todo empezó con Spiderman
Lo curioso es que todo empezó con Spiderman. Desde los años 50 el tristemente célebre Comics Code Authority (que acabó con los míticos cómics de terror de EC) prohibía la aparición de monstruos en los tebeos. Pero a finales de los 60 el Departamento de Salud y Bienestar de EE.UU. propuso a Stan Lee que realizase un cómic para advertir a los jóvenes de los peligros de las drogas. Así nació la mítica saga de Spiderman en la que Harry Osborn, el hijo del Duende Verde caía en las garras de las drogas.
El Comics Code no aprobó la historia pero Stan Lee decidió seguir adelante, con un éxito histórico, lo que hizo que la censura se relajase bastante. Además, Marvel sacó una serie de magazines para adultos que se podían publicar sin pasar por esa censura, como La Espada de Conan el Bárbaro, Shang Chi, master of Kung Fu y una sere de magazines de terror en blanco y negro, para adultos, protagonizados por personajes como El Hombre Lobo, El Hombre Cosa o El Motorista Fantasma.
Pero de entre todos ellos destacó La Tumba de Drácula, creada en 1972 por el guionista Gerry Conway y el dibujante Gene Colan que en el primer número se entintó a sí mismo, consiguiendo uno de los mejores trabajos de su carrera.
Uno de los mejores dibujantes de la historia del cómic
Gene Colan ya había destacado en colecciones como Daredevil, El Doctor Extraño o Capitán América, y cuando se enteró de que iban a sacar una colección de Drácula suplicó a Stan Lee que le dejase dibujarla, incluso llegó a mandarle unas pruebas ante las que el editor no pudo decir que no.
Pronto se le uniría el entintador Tom Palmer, como decimos, el único que entendió sus lápices y junto al que formó una de las parejas más brillantes de la historia del cómic.
Para el personaje Gene Colan se basó en el actor Jack Palance (Raíces profundas) que curiosamente no había interpretado al personaje pero que se pondría la capa y los colmillos, apenas un año después de la publicación del cómic en Drácula (1973), una película para televisión.
El descubrimiento de un gran guionista
Los primeros números contaron con los competentes guiones de Gerry Conway (Spiderman) y sentaron las bases del personaje, que era un villano sin escrúpulos, nada de versiones dulcificadas. Era el Rey de los vampiros y estaba orgulloso de serlo. Y los humanos sólo éramos su comida, como tiene que ser.
Pero todo cambió con la llegada de Marv Wolfman, en el número siete de la colección. El guionista ni siquiera era aficionado al cómic de terror; quizá por eso hizo una historia tan distinta y alejada de los clichés del género, en el que los auténticos protagonistas eran los miembros del grupo que perseguía a Drácula y que asistían a todas las fechorías del vampiro, casi impotentes.
Wolfman concibió la serie como una historia río, que narraba el enfrentamiento del bien contra el mal, y durante la que los protagonistas maduraban e incluso fallceían, como en la vida real. Un trabajo excepcional que lo convertiría en uno de los mejores guionistas del cómic americano.
Pero estaba claro que Drácula necesitaba un enemigo a su altura y ese fue Blade
El origen de Blade, el cazador de vampiros
Todo el mundo conoce a Blade, el cazador de Vampiros (que es mitad hombre mitad vampiro) por las tres películas protagonizadas por Wesley Snipes, pero lo que muy pocos saben es que el personaje nació en el Número 10 de La Tumba de Drácula.
Blade es un personaje de su época, los setenta, uno de los muchos ejemplos de la llamada “Blaxploitation” (la reivindicación de mayor protagonismo de los afroamericanos en el cine y los cómics de la época). El otro gran ejemplo de esa época es Powerman, el primer personaje negro que protagonizó su propia colección de comic (1972).
Blade se hizo famoso por famoso por sus gafas de sol y por la bandolera donde llevaba sus cuchillos de madera, mortales para los vampiros. Y que se convertiría en un personaje recurrente.
Por cierto, que si para Drácula Gene Colan se inspiró en Jack Palance, el personaje de Blade tiene los rasgos de varios actores y deportistas de raza negra, destacando el exjugador de fútbol americano Jim Brown.
La serie de terror más longeva de Marvel
La serie de Drácula duraría 70 maravillosos números, prácticamente toda la década de los setenta. Y desde entonces, su prestigio como uno de los mejores cómics de terror de la historia no ha dejado de crecer.
En 1991 Wolfman y Colan se volvieron a reunir en una serie de cuatro números para el sello Epic de Marvel. No fue lo mismo, pero fue un buen tebeo.
Colan está considerado uno de los mejores dibujantes de la historia, en parte gracias a esta serie, lo que no impidió que tuviese serios problemas económicos en los últimos años de su vida (falleció en 2011, a los 84 años).
Drácula es inmortal y se ha enfrentado a otros personajes de Marvel como Spiderman, El Doctor Extraño, El Hombre Lobo, e incluso a La Patrulla X en una saga memorable de Chris Claremont (Casi todos esos crossovers los tendréis en estos tomos). Pero nunca ha llegado a los niveles de excelencia de esta serie.
Por eso os recomendamos estos cómics que Panini y SD recopilarán en cuatro estupendos tomos. Una edición excepcional para un cómic mítico.