El ronqueo del atún de las almadrabas gaditanas.
Concluye la temporada en las cuatro almadrabas gaditanas. Sólo a la de Tarifa le restan una o dos levantás para alcanzar el cupo total de 1.100 toneladas de atún rojo. El sector reclama volver a las 1.500 toneladas de captura que tenían cuando se estableció un plan de recuperación de la especie muy esquilmada por otras modalidades de pesca.
La temporada toca a su fin y en una empresa de Barbate, que distribuye casi la mitad del atún rojo que capturan las almadrabas de Zahara, Conil y Tarifa, se van terminando los ronqueos, es decir, los despieces de estos pescados de los que se aprovecha todo. Pero aunque se acabe la temporada no se preocupen que aún queda atún fresco y además, el resto del año, la ultracongelación a menos 60 grados garantiza un producto de calidad superior.
La almadraba es un arte de pesca con 30 siglos de historia y es la modalidad que menos esquilma la población de la especie.