'Comando al sol' es testigo de la ordenación de caballeros templarios en Ponferrada y visita la cara B de Alicante
- También recorre la Sierra de la Demanda en La Rioja
- ‘Veraneo templario’, martes 20 de agosto a las 22:40 en La 1
Las cámaras de ‘Comando al sol’ retratan un momento único: la ordenación de más de una veintena de caballeros templarios, en pleno siglo XXI y en el Bierzo. Siguiendo las rutas del turismo de temperatura, le dan la vuelta a la Sierra de La Demanda riojana en busca de los lugares más frescos y prueban jugosos secretos culinarios entre bosques de hayas, pinos, fresnos y avellanos. El periplo de los reporteros finaliza en la cara B de Alicante: ni chiringuitos repletos, ni playas abarrotadas, ni rascacielos en primera línea de mar en la segunda mitad de agosto.
Noche templaria. En Ponferrada hay una lista en la que todos quieren apuntarse. Estar inscrito en ella es aspirar a formar parte de la historia de esta ciudad del Bierzo en la que sus habitantes, aseguran, llevan sangre de peregrino en las venas. Para ser elegido hay que esperar, como mínimo, tres años. Es en el Castillo del Temple, monumento histórico artístico, donde familias enteras, cuñados, sobrinas, tíos, suegros y nueras asisten a una ceremonia que desde hace 20 años convierte a Ponferrada en ciudad templaria mundial durante una noche. Después, un gran banquete congrega a cerca de 700 personas alrededor del buen vino, la cerveza, centenares de empanadas de ternera, decenas de raciones de lacón, bandejas de cecina y pucheros con potaje de bacalao; elaborado con la misma receta que la que ofrecían los templarios a los peregrinos del Camino de Santiago que atravesaban la ciudad del puente de hierro.
Un verano al fresco. Se conoce como turismo de temperatura y a él se apuntan quienes marcan en el mapa los lugares más frescos para pasar el verano. Lo cuenta Dani, guía de montaña y de la Sierra de la Demanda, un paraíso de senderos y de pistas entre hayedos, bosques de pinos, fresnos y avellanos en La Rioja. En Zaldierna, un pueblo de apenas 15 habitantes y famoso por sus croquetas, recalan los viajeros que buscan calma en este refugio natural y desconocido de La Rioja. Sus vecinos de Ezcaray, de 2.000 habitantes, presumen de sus 30 bares y restaurantes, y de celebrar una de las fiestas más peculiares del verano. Habitantes y forasteros dan vueltas sin parar alrededor de un quiosco al son de la música.
La cara B de Alicante. A tan solo media hora de Benidorm, Enrique Montoliú, ingeniero químico y hombre de negocios, buscó un lugar para levantar su casa. Encontró un solar abandonado que ha convertido en un vergel de 50.000 metros cuadrados, donde se cultivan decenas de plantas y flores autóctonas. El Jardín de l’Albarda es un oasis abierto al turista que huye de playas abarrotadas, de chiringuitos repletos o rascacielos en primera línea de mar. A pocos kilómetros, Sofía regenta el primer alojamiento rural que se abrió en Guadalest, un pueblo de Alicante que compite con el medio millón de plazas hoteleras de Benidorm y que ostenta el título de ser la localidad con más museos por habitantes de España. Quienes lo visitan se bañan en las cascadas del Río Algar y se acercan a descubrir en barca o buceando los secretos de la Cueva Tallada. Un paraíso para peces y bañistas que fue durante cuatro siglos una cantera de piedra a orillas del Mediterráneo.