'Las claves del siglo XXI' pone el foco en los mayores y en los jóvenes
‘Las claves del siglo XXI’ se centra esta semana en hablar de dos colectivos vulnerables en la sociedad: los mayores, excluidos de los trámites financieros, y los jóvenes, con sueldos bajos y alquileres altos. Además, Javier Ruiz entrevistará al escritor Alejandro Palomas, que sufrió abusos por parte de un profesor religioso.
El primer tema de la noche será la inclusión financiera de los mayores. Con la digitalización de los procesos bancarios, las personas mayores quedan cada vez más excluidas de trámites necesarios para la vida cotidiana. La atención personal es cada vez más escasa y numerosas entidades están cerrando oficinas y cajeros en la España vaciada porque su mantenimiento no les compensa. Eso obliga a muchas personas a desplazarse lejos de sus localidades para poder ir al banco.
El programa conectará en directo con la vicepresidenta económica del Gobierno, Nadia Calviño. Además, contará con una mesa de expertos en plató entre los que se encuentran Cipriano García, presidente de Caja Rural; Andrea Uña, del movimiento de pensionistas de Vizcaya; o Patricia Suárez, presidenta de la Asociación de Usuarios Financieros.
El segundo tema de ‘Las claves’ tiene que ver con los jóvenes: ¿viven mejor o peor que sus padres? El programa analizará, entre otras cosas el salario que perciben y los alquileres a los que pueden hacer frente, además de la fuga de cerebros. En la mesa de expertos se sentarán Miguel Sebastián, economista; Elena Ruiz, del Consejo de la Juventud; Joan Navarro, sociólogo; y Ana Iris Simón, periodista.
Cada tema irá acompañado por reportajes y conexiones en directo. Además, participarán en el programa de esta semana el director de El Mundo, Francisco Rosell, y el director de El Periódico, Alberto Sáez.
El entrevistado de esta semana será Alejandro Palomas (Barcelona, 1967), ganador del premio Nadal en el año 2018 por ‘Un amor’. El escritor hablará sobre un tema de actualidad: el abuso, acoso y violación que sufrió cuando tenía entre siete y ocho años por parte de un profesor religioso del Colegio La Salle.