'La noche temática' entra en el violento territorio de los cárteles de la droga
México es hoy el centro de la violencia y la tierra de los cárteles. Entre ellos destaca el de Sinaloa que se embolsa entre 3.000 y 12.000 millones de dólares al año. Más de doscientas mil personas trabajan directa o indirectamente para los narcos, incluidos los abogados que también juegan un papel decisivo en este universo violento, donde el dinero es el rey, la corrupción la norma y los muertos lo cotidiano, según muestra esta semana 'La noche temática'.
‘Si matas, llámame’
Los “narcoabogados” se mueven en un territorio donde la ley, el crimen organizado y la corrupción están íntimamente ligados. El narcotráfico ha creado un monstruo que ningún sistema judicial ha podido detener. Los abogados son la parte visible entre organizaciones criminales y estructuras políticas y financieras de países dominados por la narcoviolencia como Colombia o México.
“Yo lo primero que le digo es: cuénteme la verdad, que ante el estrado la mentira la pondré yo”, afirma Gustavo Salazar.
Para el periodista Ricardo Ravelo, lo que mueve a los abogados a aceptar la defensa de un narcotraficante es la búsqueda de fama y poder. Hay algunos que se mimetizan tanto con sus clientes que incluso se sienten ellos capos a veces.
‘En el corazón del cártel de Sinaloa’
Este documental fue grabado antes de la detención de Ovidio Guzmán, hijo del Chapo, el 5 de enero de 2023. El cártel de Sinaloa es una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo, y su especialidad es el tráfico internacional de droga. En México, la guerra de la droga se cobra 25.000 víctimas cada año y deja decenas de miles de desaparecidos. Es un gran negocio, con más de 200.000 trabajadores sólo en Sinaloa.
Este documental tiene acceso a los laboratorios clandestinos, los “cocederos”: desde allí la droga será trasladada en coches, su objetivo será llegar a Estados Unidos, su principal mercado. Sicarios, como El Güero, muestran su día a día.
En México las muertes relacionadas con el narcotráfico se han convertido en algo cotidiano; en los últimos 15 años se ha cobrado la vida de más de 230.000 personas en México. Las muertes continúan mientras muchas madres siguen buscando a sus hijos desaparecidos.