'Comando Actualidad' analiza los productos de segunda mano
Crecen los negocios que venden las devoluciones de internet, un mercado que mueve, solo en España, 30.000 millones de euros al año. En paralelo, aumentan las aplicaciones y las empresas que dan salida a los excedentes de alimentos y comidas preparadas. Cerca de la mitad del desperdicio alimentario son los platos de mayor valor: carnes y pescados o básicos como arroz y pasta. ‘Comando Actualidad’ analiza todos los efectos en ‘No tiene desperdicio’.
Se vende producto devuelto
Las tiendas que comercializan devoluciones están proliferando. Juan Manuel es mayorista y compra lotes de juguetes, herramientas, electrodomésticos, televisiones o mantas eléctricas. Todos son productos procedentes de la venta online que han sido rechazados. “Nos llegan camiones repletos con las devoluciones de Amazon y nosotros revendemos las cajas y los pallets a nuestros clientes”. “Después, la mayoría se revende en aplicaciones de segunda mano”. Juan Manuel compra a ciegas: “Te dicen los productos que te vienen en el paquete, pero no sabemos el estado en el que se encuentran”. Jesús es un particular que también aprovecha este mercado en alza. Él compra los lotes de devoluciones para comercializarlos a través de aplicaciones de segunda mano. “Es rentable porque compro muy barato. Dos o tres productos pueden venir mal pero el resto de productos están impecables”. Asegura que gana al mes entre 200 y 300 euros.
Buscadores de gangas
Decenas de ciudadanos hacen cola frente a una nave comercial en Leganés, Madrid. Esperan ser los primeros en entrar para comprar miles de artículos devueltos a precio de saldo. “Yo me llevé un armario de baño por un euro, uno igual al que había comprado mi madre hacía unos días por 160 euros”, cuenta un cliente mientras revuelve en estanterías donde hay de todo: zapatillas para perros, luces para ahuyentar a los mosquitos, escarpines para el agua, barbacoas, neveras, lavadoras, mecanismos para interruptores de luz. “Yo he visto gente cinco días durmiendo fuera para ser el primero en comprar los chollos que salen cada viernes... “, asegura otro cliente.
Se venden sobras
El excedente de alimentos o comidas preparada también ha dejado de tirarse sistemáticamente. Hay sanciones de entre 2.000 hasta 500.000 euros a productores, industria y distribuidores que no tengan un plan para prevenir las pérdidas y el desperdicio. Refood es una ONG que recoge comida sobrante de hogares, restaurantes, mercados y después la reparte donde más se necesita. Los voluntarios visitan a Mariano en un mercado municipal de Madrid. Guarda verduras que sabe que no va a vender y que los voluntarios de la ONG llevarán a gente sin recursos. Paz también hace ruta por supermercados. Compra los excedentes a través de la aplicación Too good to go.