Combarro es un pueblo marinero de la provincia de Pontevedra, en Galicia. Con unos 1.500 habitantes aproximadamente, se trata de un lugar lleno de encanto con calles de piedra que dan al mar y que se caracteriza por sus famosos hórreos y cruzeiros, muestras de la arquitectura típica gallega. Combarro se encuentra a tan solo 7 kilómetros de la capital y sus vecinos viven fundamentalmente de la pesca y los mariscos. Algunos de sus lugares más representativos son el Monasterio de Poio, la misteriosa Isla de Tambo o la Plaza de Chousa. Un lugar mágico que compagina las tradiciones más gallegas con la tecnología de última generación.
63 años | Redero
Me he dedicado toda la vida a fabricar y reparar redes de pesca junto a Lola, mi mujer. Además me encanta cantar. El mar me ha inspirado toda la vida y he grabado 6 canciones. En verano, el Club de Fútbol de Combarro organiza un festival de música para recaudar fondos para el equipo y yo protagonicé la campaña publicitaria, cantando un tema de ACDC que resultó ser todo un éxito y con repercusión a nivel nacional. Me siento muy ligado a mi tierra y ya no me imagino viviendo fuera de aquí.
24 años | Secretario del Club Naútico
Trabajo en la escuela de vela del Puerto Deportivo de Combarro, donde me encargo de gestionar la documentación, de labores de mantenimiento y de dar clases de vela. Soy del pueblo y siempre he vivido aquí. Es un placer levantarse por las mañanas y tener la montaña a un lado y el mar al otro. Además voy al trabajo andando en sólo 10 minutos. Todo lo que necesitas para vivir, aquí lo tienes.
49 años | Mariscadora
Nací en Combarro y como mi abuela y mi madre, soy mariscadora de a pie. Mi marido y mi hijo también viven de la pesca, así que al mar se lo debo todo. Todos los días voy al gimnasio, aunque sea media hora, y también me encanta ir los fines de semana al Furancho, un lugar de reunión muy típico en Galicia, que consiste una casa-bodega que vende el excedente de vino de la cosecha, donde los vecinos llevan su propia comida y pasan el día. Hay tantas cosas que hacer y tantas fiestas que no hay tiempo de aburrirse. Aquí soy feliz.
46 años | Ordenanza municipal
Aunque trabajo en el Ayuntamiento de Poio, mi verdadera pasión es la música. Por un lado como director del Coro de Combarro, donde rescato canciones locales para evitar que se pierdan, también dando clases de salsa en una academia y, además, compongo mis propios temas y ya he grabado tres discos. Gracias a las nuevas tecnologías puedo hacer lo que más me gusta sin moverme del pueblo y eso no tiene precio.