Los inventos del futuro
- El Club de Inventores lleva promocionando proyectos españoles desde hace 25 años
- Sólo el 3% de los inventos consiguen comercializarse
- Los jubilados, los mejores inventores
Juanito el Grande ha estado a las puertas de conseguir el sueño de su vida: que los grandes almacenes del barrio le compren su rudimentario sistema de alarma. A pesar de que su invento es rechazado, su enorme ingenio le ha valido para conseguir un puesto en este establecimiento como empleado de mantenimiento. Al igual que él, cientos de personas anónimas esperan convertirse en los Thomas Edison del siglo XXI y popularizar sus increíbles inventos, ¿quieres conocer algunos de los más originales?
Los inventos electromecánicos, los que más abundan
El caramelo elástico, la sábana inmovilizadora, el asa para el envase de tetrabrik o el preservativo bucal adaptable en interior o exterior de boca son algunos de los insólitos inventos que están esperando a que algún empresario quiera hacer negocio con ellos. Para facilitar esta labor, hace 25 años que el Club de Inventores apadrina los proyectos españoles más originales y los promociona por ferias de medio mundo.
El director de esta asociación, Manuel Matellán, asegura que "los inventos que más posibilidades tienen son todos los que solucionan los problemas que surgen en la vida cotidiana". A pesar de ello, "sólo el 3% de los inventos llegan a comercializarse", una cifra "muy baja" que, a su juicio, se debe "a la falta de sensibilidad por parte de las instituciones y las empresas, que no apuestan por la innovación".
La botella transformable en copa, entre los inventos con más posibilidades
Entre los inventos españoles a la espera de ser comercializados, Matellán piensa que uno de los que más posibilidades tiene es la "botella transformable en copa", un recipiente que permite beber confortablemente en cualquier lugar y que reniega de la incómoda y a la par poco glamourosa costumbre de beber a morro.
No menos original es la "cajetilla de Cigarrillos con espacio habilitado para almacenar colillas", un invento ideal para disminuir la suciedad en las calles y que puede evitar que algunos desaprensivos tiren colillas en los bosques.
La "sábana inmovilizadora" es otro de los inventos más originales que alberga el Club de Inventores. Especialmente diseñada para niños, es similar a una sábana bajera ajustable pero incluye una chaqueta -disponible en manga larga y corta- que se adapta a la anatomía del niño, limitando sus movimientos.
El propio Matellán está a la espera de comercializar para Navidades su "peonza multiplicable", la cual, cuando se lanza y toca el suelo, expulsa de su interior varias peonzas pequeñas.
Los mejores inventores: los jubilados
Llama la atención que un porcentaje muy elevado de los inventores miembros de esta asociación son jubilados. Aunque Matellán afirma que "no hay una edad mejor que otra para inventar", sí que es cierto que muchas personas cuando ya tienen "pocas cosas que hacer" trabajan "para materializar los inventos que tienen en la cabeza desde hace años, y viven con la ilusión de patentarlos y comercializarlos algún día".
Quizás muchos de estos inventos dentro de unos años pasen a formar parte de la amplia lista de creaciones españolas, como el submarino de propulsión eléctrica, la fregona o el "chupa chups". A la espera de ello, Matellán tiene claro que los mejores inventos de la historia han sido la radio, ya que, según afirma, "ha permitido que se comunique todo el mundo y propició la aparición del transistor, que convirtió al pastor en un culto" e Internet, que nos ha puesto "al alcance de la mano el saber universal, y a precio asequible".