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El coro de la cárcel se despide de su profesor

  • Los internos homenajean a Xavi Torras, el profesor del taller de música
  • El coro de la cárcel finaliza. Todos los programas pueden verse en la web.

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El coro de la cárcel - Programa 13

Los preparativos para el gran concierto final tuvieron ocupados a los miembros del coro. El montaje del escenario se realizó en el campo de fútbol de la prisión y allí se reunieron los internos para su última clase con Xavi. Charlaron del final del coro y de los objetivos que tenían de cara a futuro.

En un día tan especial, las familias de los internos también se acordaron de ellos aunque estuvieran lejos. La China recibió un paquete de su hermana Erika con un vestido negro para que sus hijas le vieran guapas en la actuación. Por su parte, Antonio recibió una carta muy especial de su madre. Le envió fotos de sus abuelos para que los tuviera cerca del corazón en un momento tan importante.

El Gran Concierto

Para que todo estuviera listo el día del concierto, algunos presos se ofrecieron a ayudar a los técnicos que estaban montando el escenario. También hubo mucho movimiento en la peluquería del módulo de mujeres. Las chicas se prepararon con mucho esmero para su gran cita con el público.

Por fin llegó la hora del concierto. El punto final de un camino que los presos han recorrido juntos durante tres meses. Hombres y mujeres se unieron por última vez sobre un escenario para interpretar las canciones que han hecho de ellos "El coro de la cárcel".

Todas las canciones aprendidas a lo largo de estas doce semanas fueron interpretadas sobre el escenario delante de un público numeroso. Casi 1.000 internos del centro vibraron con la interpretación de los alumnos de Xavi.

Emocionante despedida

El coro abandonó el escenario para reunirse por última vez en el taller de música, el lugar que les vio crecer como grupo y como personas. Las clases con Xavi han supuesto un cambio para todos ellos. Lo que imaginaban como una simple actividad, ha sido una de las experiencias más emocionantes que han vivido. Y uno a uno se lo agradecieron a su profesor. A modo de despedida y coincidiendo con el cumpleaños de Xavi, todos le hicieron un regalo personal.

El taller de música cerró sus puertas para siempre. Fue la hora del adiós para el coro de la cárcel. Hombres y mujeres volvieron a separarse para continuar sus vidas en prisión hasta el día que recuperen la libertad.

Xavi llegó como profesor y se marchó como amigo. Pero no hay muros que puedan contener los sentimientos que han compartido y que jamás olvidarán.

Allí en "La Moraleja", la vida continúa...