Estella, ciudad de peregrinos
En el centro de la Merindad de Estella, a mitad de camino entre Pamplona y Logroño, rodeada de un conjunto de colinas bajas que la protegen del viento, se encuentra esta ciudad de 13.000 habitantes. Ciudad monumental nacida al calor del Camino de Santiago.
Historia
La influencia del Camino y de la judería envuelve toda la ciudad. Fue fundada en el año 1090 por Sancho Ramírez, para dar posada a los peregrinos que caminaban a Compostela. Durante siglos fue la población comercial e industrial más importante del reino de Navarra y vivió su máximo esplendor en los siglos XII y XIII.
"La Toledo del Norte"
En el siglo XV ya se la conocía como "Estella la bella" y aún hoy sigue haciendo honor a este nombre. Es ciudad románica y en ella podemos encontrar palacios, casas señoriales, iglesias, conventos, puentes¿ Tesoros arquitectónicos que le han valido el sobrenombre de "La Toledo del Norte". De obligada visita, son la iglesia de San Pedro de la Rúa, la de San Miguel, la del Santo Sepulcro y el Palacio de los Reyes de Navarra, único ejemplo de románico civil en la comunidad.
Cultura, arte y gastronomía
Callejear por Estella es un ejercicio recomendado. Encontrará una ciudad alegre y cordial que ofrece a todo aquel que la vista historia y arte, una extensa y variada programación cultural, excelente gastronomía, hermosas tradiciones y animado comercio en su mercado de los jueves. Ya lo decía Aymeric Picaud en el siglo XI: "Estella es una ciudad de buen pan, excelente vino, mucha carne y pescado y toda clase de felicidad"