Joaquín Candel: "Cuando juega la selección española, no trabajo"
En España Joaquín era cámara y en Las Vegas se convirtió en piloto. Así que quién mejor que él para mostrarnos el Gran Cañón del Colorado desde el cielo.
Españoles en el mundo: ¿Te gustaría regresar a España?
Joaquín Candel: Me gustaría. Pero por mi tipo de trabajo, de momento es imposible. Lo más seguro es que vuelva cuando me jubile.
EM: ¿Qué tiene Estados Unidos que no tenga España?
J.C.: Oportunidades. Dentro del mundo de la aviación, nunca he tenido problemas para encontrar trabajo aquí. Sigo opinando que si tienes ganas de trabajar duro, este es el país para conseguir tus sueños (al menos en aviación).
EM: ¿Qué supuso para ti trasladarte a otro país?
J.C.: En mi caso fue algo gradual, no fue hacer las maletas e irme para siempre. Durante seis o siete años tuve esa idea de volver a España. Yo llegué a Estados Unidos como estudiante, como alumno de un programa diseñado entre una escuela de aviación en Los Ángeles y otra en Madrid. Me iba a Estados Unidos por 6 meses y pensaba estar de vuelta antes de Hogueras (junio). La escuela en Los Ángeles me ofreció quedarme como instructor para las siguientes clases por otros 6 meses. Como en aquel año no había mucho trabajo con las aerolineas en España (1994), decidí quedarme. No fue hasta el 2001 que me di cuenta que estas extensiones temporales de 6 meses, y la espera a conseguir trabajo en alguna aerolinea en España, se había transformado en algo permanente para mi en Estados Unidos.
EM: ¿Por qué participaste en Españoles en el mundo?
J.C.: Todo fue idea de mi hermano (Ricardo). Me contó algo sobre el programa y me convenció para hacerlo. Yo le dije que sí, que me apuntara, porque estaba seguro de que no me iban a llamar. No tenía ganas de discutir aquel día, iba bastante liado.
EM: Durante la grabación del programa, ¿te sentiste cómodo hablando a la cámara? ¿Te viste bien luego en la televisión?
J.C.: Todos mis amigos y familia me han comentado que se me veía muy natural, que no estaba nervioso. La verdad es que estar enfrente de la cámara impone. Sí que estaba bastante nervioso. El equipo que vino a hacer la entrevista, Lucía y Raúl, tenían bastante experiencia haciendo este tipo de grabaciones. Sabían cómo tranquilizarme y hacer que me sintiera cómodo. Y para cuando te dabas cuenta, ya habías terminado de grabar. Si se nos ve tranquilos a todos en la entrevista es todo gracias a la gente que la hace, son todos muy buenos.
EM: ¿Recuerdas alguna anécdota de la grabación?
Hay una parte de la grabación que hicimos en el lago (Lake Mead), donde suelo montar en bici. Lucía quería que el cámara (Raúl) me grabara mientras estaba en la bici por la carretera y hacerme la entrevista mientras pedaleaba. Yo en la bici y ellos en el coche. Lo que no sabíamos era que Lucía no conduce. Así que nos tocó darle unas clases (en 5 minutos) de como conducir en línea recta. Nos buscamos un párking de un puerto del lago que estaba vacío e hicimos la entrevista de un lado a otro del parking. Raúl con la cámara grabando en el lado derecho y con una mano en el volante (por si acaso), Lucía conduciendo y haciendo las preguntas, y yo al lado derecho de mi coche (en bici) contestando. Hubo un par de instantes que tuvimos que cortar porque casi me pego contra el coche. Y lo único en lo que yo podía pensar era en como le iba a explicar a los de mi seguro que me había atropellado mi propio coche en un parking...
EM: Tras tu paso por el programa, ¿ha cambiado en algo tu vida?
J.C.: Todo fue el año pasado, así que no ha habido muchos cambios. He tenido bastante gente que me ha contactado con preguntas sobre aviación y escuelas en Estados Unidos.
EM: ¿Qué noticia de España te ha llamado la atención recientemente?
J.C.: Sigo el fútbol bastante cerca. Veo entre dos y tres partidos de la liga a la semana en directo. No vuelo cuando la selección juega, por no perderme el partido. Y aunque soy del Real Madrid, disfruté bastante viendo al Barça ganar la Champions en Londres. También sigo en triatlon a los españoles Eneko Llanos, Virginia Berasategui y Javier Gómez Noya. En cuanto a política, prefiero no hablar.