Centros de mesa para acompañar el menú de navidad
- Impera la naturalidad, el estilo campestre y la sencillez
- Es mejor que los centros sean pequeños para que no molesten
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Las flores son uno de los elementos de decoración más eficaces y bellos. En estas fechas resultan imprescindibles para alegrar la mesa, un rincón o para hacer un centro ornamental. La flor de pascua ha sido durante años la reina de las fiestas pero ahora no atraviesa su mejor momento. Los amantes de estas plantas de flores rojas pueden combinarlas con piñas, cardos y bolas de madera para contrarrestar con un toque country.
Como he dicho en varias ocasiones, la consigna es mezclar e inspirarse en la naturaleza. Lo mas in es crear centros con plantas silvestres de distintos tamaños y lograr un efecto de ramo natural. Este tipo de plantas casa muy bien con piedras, piñas, ramas secas, musgo y rafia.
Se puede cambiar el cesto de mimbre por uno de porcelana antiguo, cerámica rústica o de cristal rudo. Otra opción en camuflar el recipiente con tela de arpillera, telas antiguas de la abuela o el siempre elegante hilo blanco. Si tienes un broche antiguo puedes unir la tela con él para añadir una pizca de glamour.
Se tiende a desterrar el negro pero el azul marino, gris y berenjena van muy bien con los tonos de la naturaleza. En cambio se huye de las combinaciones típicamente navideñas: rojo y oro, verde y rojo, plata y blanco o verde y oro.
Para darle un toque más sofisticado al adorno se puede espolvorear polvo de estrellitas plateadas, introducir alguna bola de cristal o entrelazar las flores con alguna cinta pequeña de raso o terciopelo. Para centros de casas de campo se puede utilizar cardo verde, olivo o tomillo. Si el entorno es moderno o de diseño se recomienda algo más relajado como una base de musgo con una rama seca y un pequeño toque de cristal.
Hay que evitar que los centros dificulten la visión. “Si la mesa es grande es mejor colocar varios pequeños repartidos, que no sean altos”, dice Patrick Fransen de Fransen et Lafite. Los dueños de esta floristería de Madrid se desplaza a domicilio para ver la vajilla y la cristalería que se van a utilizar e integrar los adornos a la perfección. En el blog La vida al bies podrás conocer mejor esta floristería tan especial.
Si hay niños cerca se puede pedir su ayuda para crear algo más divertido por ejemplo colocar tres muñecos sentados para que abracen ramos de hojas o flores en distintos tonos. También pueden decorar alguna vasija vieja para darle un toque naíf que rompa rigidez a una cómoda clásica o a un mueble castellano.