Cómplices de Simon MacBurney
- Estreno mundial de “Juego de Cartas: Picas” de Robert Lepage
- Carles Santos lleva a Barcelona un homenaje a Schubert: Schubernacles humits
- Malgosia Szkandera llevó su Bag Lady al prestigioso festival Titirimundi
- Mi reino por un caballo, emitido el lunes, 28 de mayo, en La 2
El teatro, en La 2
Arantxa Vela dirige la revista especializada en danza y teatro de La 2 de TVE.
Mi reino por un caballo es un programa sobre actualidad de las artes escénicas que se emite en La 2 de TVE los lunes, a las 20.00 horas, y también la noche del domingo al lunes a las 00.00 horas.
Parece que lo que no sale por la tele ni existe ni pasa, pero hay otros mundos y no están en éste.
“lo que no sale por la tele ni existe ni pasa, pero hay otros mundos y no están en éste“
Hace un par de años, visionando unas imágenes que nos había dado la compañía de Peter Brook de la obra 11 y 12, encontré a César Sarachu, uno de los actores de Cámara Café, el simpático Bernardo.
Pensé: mira tú, qué curioso. Entonces te das cuenta de que no imaginas, por muy exitosa que sea la serie, que uno de sus actores tenga esa otra vida en la que colabora con Brook o con la Complicité, que fue de lo que me enteré el otro día.
Un tipo curioso
El Maestro y Margarita, la obra que la compañía británica ha traído al Festival de Otoño en Primavera de Madrid, cuenta con él en su reparto y, según nos dijo el mismo César en la entrevista, no es la primera vez que trabaja con Simon MacBurney en uno de sus proyectos.
“No es la primera vez que César Sarachu trabaja con Simon MacBurney “
MacBurney es un tipo curioso. Llegó al encuentro con los periodistas con un cortado en la mano y con el aspecto de haber dormido fatal esa noche.
César nos había adelantado que Macburney venía siempre al primer ensayo bien armado, o sea, empapado de la historia y con mucho trabajo de campo hecho de antemano.
Un libro delirante
Para quien no haya leído el Maestro y Margarita, tengo que aclarar que es un libro delirante, con muchos personajes y tramas diferentes que lo convierten en un relato complejísimo. Es, además, una novela y cuesta bastante adivinar cómo se podría poner en escena.
“El Maestro y Margarita, tengo que aclarar que es un libro delirante, con muchos personajes y tramas diferentes que lo convierten en un relato complejísimo“
La sensación que da MacBurney es de no apichonarse ante semejante tarea y de no hacer otra cosa que pensar en su proyecto mientras lo lleva a cabo, de ahí el descuido de su aspecto y cierto aire de obsesivo, deduje.
Entonces vinieron las bromas sobre si las primeras representaciones fueron caóticas y que MacBurney tuvo que salir a escena para avisar al público de que igual no podían hacer el espectáculo sin interrupción porque todavía no habían hecho ningún run through, (pase completo de la obra).
Añadió que no descartaba seguir retocando el trabajo en Madrid, al igual que hacen Brook o Robert Lepage.
Y entonces saltó la polémica. Una periodista le comentó que seguro que para los directores es muy interesante el contacto con el público para ir acabando sus trabajos, pero que igual para el espectador no lo era tanto servir de "conejillo de indias".
Lo primero que MacBurney dijo (con cara de pillo) fue: "respeto tu punto de vista y sé que lo que está detrás de tus palabras es que igual me estoy excusando por no haber podido acabar mi trabajo. Pues no, el trabajo está acabado."
“La sociedad de consumo pide productos con un sentido cerrado, bien etiquetados, empaquetados y entregados al consumidor en el plazo previsto, pero esto es otra cosa“
El público va a ver un espectáculo terminado. La sonrisa del principio desapareció y, como si alimentara un animal, la tensión del británico fue aumentando según hablaba. Se estaba enfadando, o eso me pareció.
Para él –contesto- es un asunto político. La sociedad de consumo pide productos con un sentido cerrado, bien etiquetados, empaquetados y entregados al consumidor en el plazo previsto, pero esto es otra cosa.
El teatro –siguió- tiene que ver con el presente y el consumismo con la inmediatez. Cuando tú deseas algo, te proyectas entonces en el futuro, lo consigues lo antes posible y, en cuanto lo tienes, se convierte en pasado porque tienes que irte otra vez al futuro para desear y que el sistema no decaiga.
El teatro no es así. Ocurre delante del espectador y es el espectador el que completa lo que los actores construyen para él en ese momento. Y ahí vino la segunda puntualización a la periodista.
“El teatro tiene que ver con el presente y el consumismo con la inmediatez“
Uno no puede hacer obras para el público si luego, cuando las hace frente a él, no lo atiende y las transforma a tenor de lo que ha percibido. Insistió mucho en que para él era una cuestión política y habló de lo difícil que lo tenían ahora los nuevos directores porque se les exigía "resultados y plazos".
Para mí, lo malo que tiene lo que nos contaba MacBurney es que acabamos creyendo que pagar (una entrada, por ejemplo) nos garantiza la satisfacción de un deseo o de un apetito.
“Queremos creer que el dinero nos ofrece la seguridad de que nada nos va a perturbar y que todo nos va a complacer“
Queremos creer que el dinero nos ofrece la seguridad de que nada nos va a perturbar y que todo nos va a complacer. Nos hace sentir la ilusión de que somos la medida del mundo. Pero si no dejas que nada te turbe, si sabes de antemano lo que vas a "comprar", es que piensas irte como viniste, con lo mismo, sin preguntarte, sin cuestionarlo.
¿Entonces para qué vivir si nos vamos a quedar como estábamos? ¿Para que ir al teatro si no te vas a llevar nada nuevo a casa? Y yo pregunto ¿es que sólo existe una única forma de finalizar un trabajo? ¿Es que existe lo mejor? Pues primera noticia.
Además, en este programa...
El festival de Otoño en Primavera de Madrid acogió en sus comienzos un estreno mundial: “Juego de Cartas: Picas” de Robert Lepage, primera entrega de una tetralogía que llevará por título los distintos palos de la baraja.
“un obra coral en la que se van entrelazando la historia de varios personajes alrededor de un hotel en Las Vegas“
Se trata de un obra coral en la que se van entrelazando la historia de varios personajes alrededor de un hotel en Las Vegas.
Otro de los grandes pasó hace unos días también por el festival madrileño, Simon MacBurney. El director de la compañía británica Complicité presentó una adaptación de El Maestro y Margarita de Mijaíl Bulgákov.
Entre sus actores el popular Bernardo de Camara Café, César Sarachu, quien además de trabajar con Brook, no es la primera vez que colabora con Complicité.
Carles Santos lleva al teatre LLiure de Barcelona un singular homenaje de Schubert que ya presentó en el festival gerundense Temporada Alta: Schubernacles humits (Schubernáculos húmedos).
Continuamos ofreciendo reportajes sobre el prestigioso festival segoviano de títeres Titirimundi. Malgosia Szkandera llevó a su Bag Lady y nosotros la entrevistamos para el programa.
La madrileña sala alternativa Tribueñe presenta una programación sorprendente. Estuvimos con el dramaturgo Hugo Pérez durante las preparación de “Donde mira el ruiseñor mientras cruje la rama”. Presentamos a este atípico talento teatral en nuestro documentito.