Leiva Vs. Ferreiro cantan bajo la lluvia
- Ex-Pereza y Ex-Piratas hicieron una gira conjunta durante varias semanas
- En ella intercambiaron pareceres, canciones e influencias
- CONTENIDO EXTRA: Mira los dos temas que interpretaron para nosotros
Márcalo en la agenda
Iván Ferreiro en concierto:
29 de marzo - Auditorio (Pola De Siero)
30 de marzo - Posada de las Ánimas (Boiro)
11 de abril - Centro cultural de la Ciudad (Lorca)
13 de abril - Teatro López de Ayala (Badajoz)
3 de mayo - Teatro Caja Sol (Sevilla)
17 de mayo - Teatro Gaztambide (Tudela)
Leiva en concierto (junto a Loquillo y Ariel Rot):
6 de junio - Palacio Vistalegre (Madrid)
8 de junio - Pueblo Español (Barcelona)
28 de junio - Palacio de Deportes (Málaga)
En octubre pasado, Iván Ferreiro y Leiva echaron un pulso musical en una sala de Madrid. Mano a mano, repasaron algunos de sus temas favoritos y aquel primer duelo vocal derivó, meses después, en una minigira que les ha llevado por Madrid, Donosti, Barcelona, Valencia, Vigo y Sevilla. Un tour minimal hasta en los instrumentos (apenas guitarra y teclado) y que, en el caso de nuestro acústico, prescindió hasta de las teclas.
La idea de estas grabaciones es hacerlas en la calle, pero amaneció el día lluvioso y frío y tuvimos que tirar de plan B. Nos fuimos al restaurante El Espejo, en plena Castellana/Recoletos, en Madrid, un local de decoración art noveau con sillones de terciopelo y enormes ventanales. Un salto en la máquina del tiempo a principios del siglo XX que nos salvó la vida.
Así fue la grabación
Y en esa atmósfera vintage andábamos flotando cuando aparecieron Iván y Leiva. Estaban en medio de la prueba de sonido para su concierto de esa misma noche pero no dudaron en atendernos, amabilísimos. Y nos regalaron dos temas: "Crímenes perfectos" de Andrés Calamaro (canción fetiche de Leiva), y "Champagne", de Pereza.
Y ocurrió que, con esta última, el cosmos quiso regalarnos uno de esos momentos sublimes por los que merece la pena dedicarse a esto del audiovisual: Empezaba Leiva a cantar aquello de "terminé de llorar y se puso a llover...", cuando justo detrás, en los cristales, la lluvia comenzó a arreciar al compás de la guitarra. Impagable.
Luego, el caos. Sí, porque, si con un tema ajeno como "Crímenes perfectos" el rodaje había resultado impecable, con esta otra canción (con la suya precisamente) Leiva sufrió un momento de atasco mental. Imposible entonar correctamente un trozo de la letra. Faltaban apenas tres horas para el concierto y el nerviosismo hacía mella: "No voy a poder no voy a poder", repetía sin parar mientras Ferreiro, que se había metido dos tazas de chocolate entre pecho y espalda, trataba de animarle sin parar de reir. Lógicamente, al final no llegó la sangre al río y tan encantadoramente como vinieron, se fueron. Y dio tiempo a todo y nos reímos un montón. Y el acústico quedó divino. Y el concierto fue un éxito. Y qué felices ellos y nosotros.
En breve, Leiva, que le ha pillado el gustete a eso de las giras conjuntas, emprenderá otra, esta vez con Loquillo y Ariel Rot. Aunque lo inmediato es promoción en Argentina y, en junio, comenzar a trabajar en el nuevo disco. Mismo mes, por cierto, que ha elegido Ferreiro para comenzar el suyo, que verá la luz después del verano.