'Carta a Eva', la historia de Eva Perón, Carmen Polo y Juana Doña

• Una miniserie de dos capítulos dirigida por Agustí Villaronga
• Ha recibido premios y distinciones en varios festivales internacionales

Julieta Cardinali (Eva Perón), Jesús Castejón (Franco) y Ana Torrent (Carmen Polo)

Juana Doña, Carmen Polo y Eva Perón. Tres mujeres entrecruzan sus vidas durante la visita oficial de Eva a una España aislada del mundo en 1947. Después de esta visita ninguna volverá a ser la misma. Carta a Eva, dirigida por Agustí Villaronga, narra la historia de estas tres mujeres.

Diciembre de 1946. España se encuentra aislada del mundo. En New York, una votación de las Naciones Unidas determina por abrumadora mayoría el retiro de todos sus embajadores. España es sospechosa de pro-fascista y culpable de haber simpatizado con la Alemania nazi y la Italia de Mussolini.

En este contexto histórico, tres mujeres definen la época. La primera de ellas es Eva Perón, la antigua actriz y actual mujer del presidente argentino Perón. Su marido ha decidido romper el aislamiento español ya que admira a Franco por ser el último baluarte en la lucha contra el comunismo y en señal de agradecimiento, Perón está invitado a España.

Frente a la comunidad internacional, decide enviar a Eva como su representante, y ahora es ella quien debe aprender a jugar las cartas de la diplomacia. Se define por el gusto de ayudar a sus pobres "descamisados" y domina la política directa, sin subterfugios, siempre buscando el contacto con el pueblo. En este viaje tiene que aprender protocolo a marchas forzadas y asumir la pompa como si fuera una de las oligarcas a las que tanto odia.

Carmen Polo es la segunda mujer sobre la que versa la historia. La esposa de Franco, apodada la "dictadora del dictador", se teme lo peor ante la visita de su homóloga argentina. Mientras espera la visita de tan ilustre huésped, "La Señora" recibe información de aristócratas argentinas que critican a Eva Perón.

Carmen Polo teme al pueblo, vive relajada y feliz en El Pardo y esta visita tiene todos los elementos para hacer temblar los cimientos de su tranquilidad. Durante la preparación del magno recibimiento discute a menudo con Franco sobre cómo se debe honrar a la argentina, mientras ella se pregunta si realmente es necesario agasajar a una mujer de su calado.

Y la última mujer en discordia es Juana Doña. Como tantos otros españoles, Juana perdió a su marido frente a un pelotón de fusilamiento, y a una hija en un campo de refugiados. Solo le queda su hijo Alexis y Paca, su madre. Todos ellos forman parte de los vencidos tras la Guerra Civil, parte del pueblo hambriento que lucha por su supervivencia.

De hecho, la lucha de Juana Doña es más bien literal, desde la clandestinidad forma parte de una célula comunista que coloca una bomba en la Embajada Argentina, tras escuchar al embajador argentino declarar que “España es un oasis de paz”. A los pocos días, Juana es detenida y condenada a muerte.

Las historias de estas mujeres se irán entrecruzando durante la visita oficial. La familia de Juana escribe una carta a esa mujer argentina, que siempre habla sobre los pobres en sus discursos, para pedirle que interceda en el indulto para su hija. Finalmente la misiva llega a manos de Eva que, inmediatamente, toma cartas sobre el asunto.

El problema llega cuando Carmen Polo, harta ya de los inconvenientes causados por su huésped, descubre la carta y se dispone a parar los pies a la invitada. No puede consentir que se salga con la suya. Después de esta visita ninguna volverá a ser la misma.