Más Isabel - El nacimiento del príncipe Juan

• Por fin llega el esperado futuro heredero de los tronos de Castilla y Aragón
• ¿Cuándo y cómo fue el nacimiento del príncipe Juan?
• Otras curiosidades y datos históricos en 'Más Isabel'.

Han pasado ocho años desde que naciera la princesa Isabel y la reina vuelve a estar embarazada. Un embarazo más que deseado con el que los Reyes Católicos esperaban que llegase el ansiado heredero.

Y llegó, "el nacimiento del príncipe ocurrió el día 30 de junio de 1478, entre 10 y 11 de la mañana", cuenta Tarsicio de Azcona en su libro 'Isabel la Católica'. Ángeles Irisarri, autora de 'Isabel, la reina', nos da más datos: "La venida al mundo del príncipe se adelantó cuatro semanas, en consecuencia pesaría menos que un niño nacido a su tiempo".

El futuro rey recibió el nombre de Juan, "sin duda por haberse llamado así sus dos abuelos, paterno y materno", precisa Azcona.

¿Cómo fue el nacimiento del príncipe Juan?

En el capítulo de hoy vemos como la reina da a luz en una habitación ¡llena de gente!. ¿Realmente ocurría así? Óscar Villarroel, profesor de Historia de la UCM no saca de dudas: "Cuando nacen los hijos de un rey, especialmente si podía nacer un heredero, había todo un ritual sobre quién tenía que estar presente. Y tenía que haber mucha gente presente para dar fe de que, efectivamente, ese niño era hijo de la reina". Según nos cuenta Villarroel, la misión de todo este "público" estaba clara: "Había que dar fe de que efectivamente había nacido, de que nacía vivo, de que era un niño o una niña y de que efectivamente ese bebé era hijo de la reina".

Esta manera tan "concurrida" de dar a luz tenía trasfondo político y un porqué ligado a la lucha por el trono de Castilla entre Enrique de Trastámara y Pedro I 'El cruel': "Para legitimar esa dinastía bastarda que eran los Trastámara, se llegó a decir que Pedro I era el hijo de una judía", cuenta Teresa Cunillera. Según la asesora histórica de 'Isabel', el "rumor" decía que el verdadero heredero habría muerto en el parto y habrían puesto en su lugar el hijo de una criada judía. Ninguna de las historias se podían demostrar porque no había nadie en el momento del parto.