Eduardo Cayuela: "Quiero darle un poquito de mambo a la gente"
- Eduardo tiene 26 años y es de Santa Susanna (Barcelona)
- Actuación de Edu Cayuela: "Mambo number 5"
Con tan solo 17 años Eduardo entró a formar parte de "Canto coral", un gospel amateur de Palafolls (Barcelona), con el que se recorría los auditorios de la ciudad catalana. Más tarde, se sumó a la orquesta "La Litoral” en la que permaneció durante dos temporadas. Pero el gran salto lo dio con la "Orquesta Girasol”, donde disfrutaba trabajando antes de comenzar su aventura en Uno de Los Nuestros.
Este enamorado de los ritmos latinos viene pisando fuerte y con ganas de sorprender al público. Una amiga fue quien le avisó de los castings del programa. "¡Ahora le debo un jamón por lo menos!”, cuenta entre risas.
Su lado más humilde y divertido
Este barcelonés confiesa sentirse "tremendamente halagado” cuando la gente le muestra su apoyo al encontrársele en la calle, aunque aún sigue "muriéndose de vergüenza” cuando lo hacen.
Comprende lo que sienten sus admiradores. "También he sido fan y sé lo que se siente, personalmente, me gusta actuar como querría que hiciesen conmigo”.
Su toque personal
Eduardo es conocido por su carisma y vitalidad en el escenario, es un auténtico showman. Tras su paso por "El Número Uno” en el que daba un toque muy peculiar a sus actuaciones con sus conocidas y alardeadas "chaquetitas”, esta vez quiere darle más importancia a su potente voz. "La indumentaria es un toque pero la esencia va por dentro y quiero que la gente vea eso”.
La música en directo es la clave de este programa
Eduardo se siente muy ilusionado con su vuelta a la televisión. "Sin duda, es una ventana para que la gente te siga recordando o para que te conozca por primera vez. Toda oportunidad se vuelve única y formar parte de un grupo es lo que más deseo”.
"Uno de Los Nuestros es el programa que me ha ofrecido lo que más valoro: cantar con música en directo sin playback”. Se emociona cada vez que sale al escenario sabiendo que tiene una banda de profesionales y que va a poder ver sus caras y reacciones. "Sabes realmente si les gustas o no, sin trucos. Las sonrisas del público, sus aplausos, los bailes…todo eso te sirve de guía para saber si lo estás haciendo bien”.
Energía y emoción por encima de todo
El barcelonés se siente muy cómodo en el escenario. "Aunque los músicos se pongan 'malotes', son majísimos y me hicieron sentir muy a gusto cantando con ellos. Me encontraba como con un grupo al que conoces desde hace años”.
En cuanto al tema que ha defendido, "Mambo Number 5”, asegura haber disfrutado con él y haber cumplido su objetivo, "darle un poquito de mambo a la gente”. Eduardo intenta siempre empatizar con el público y hacerles partícipes de su actuación. "Si yo me lo paso bien espero que la gente también lo haga, si no tendré que cambiar mi forma de trabajar”.
Tras toda esa enérgica faceta de artista se esconde también un hombre romántico que desearía "cantar desde el corazón y defender un tema con un pie de micro, una buena iluminación y una increíble balada que emocionase a la gente. Me gusta que sonrían conmigo pero también que se les erice la piel”.
Unanimidad por parte de la orquesta
"Un golpe de energía y un voto de confianza”, así define Eduardo lo que sintió en ese momento. "Agradezco muchísimo que no me parasen. No pienso desaprovechar esta oportunidad, quiero seguir trabajando y esforzándome cada día para ellos y que no pulsen ese botón que diga ‘salida’. El programa entero me da muy buen rollo y por nada del mundo querría tener que abandonarlo”.
De su paso por Uno de Los Nuestros espera poder trabajar, "conseguir una banda y explotar al máximo mis cuerdas vocales. Si tiene que llegar un disco, llegará, pero mi sueño siempre ha sido estar sobre un escenario".