Un país para comérselo viaja a Trujillo

Un país para comérselo - Cáceres, de pata negra

El cerdo ibérico es el protagonista de esta entrega, en la que Ana Duato viaja a Trujillo para conocer de cerca cómo vive el rey de la dehesa, conquistador de paladares en todo el mundo.

En Trujillo, además de seguir todo el proceso de producción de un jamón, Ana recorre las calles y la historia de la ciudad, que tan ligada está a la conquista de América.

Uno de los productos locales más desconocidos fuera de la región son las criadillas de tierra, que Ana aprende a recolectar y que luego prepara con el chef Toño González en su cocina de Cáceres.

Además de criadillas, el campo es pródigo en otros productos silvestres que en compañía de vecinos de Villamesías, Ana aprende a identificar y cocinar.

La pesca de la tenca, practicada como pasatiempo por muchos trujillanos, y un paseo entre las nubes son otras de las actividades que hacen de este recorrido por tierras extremeñas un viaje inolvidable, que se cierra con unas migas cocinadas en mitad del campo.