Daniel abandona las cocinas de MasterChef por arriesgar demasiado
- El valenciano fue incapaz de plasmar su idea en un gran plato
- Lorena y Vicky, pésimas capitanas en la Prueba por equipos
- Vuelve a ver el tercer programa completo, sólo en RTVE.es
Daniel ha colgado el delantal de MasterChef tras cometer el mismo error una y otra vez: ser más ambicioso de lo que puede asumir. Intenta hacer grandes platos pero el resultado final es un despropósito, algo inacabado.
"Me arrepiento de haber arriesgado tanto. Pero si no hay riesgo no hay gloria", admitió el valenciano.
El jurado vuelve a darles un toque de atención por su actitud, desgana y falta de de humildad. "Habéis venido porque tenéis pasión por la cocina. Es hora de demostrarlo o coger la puerta", exclamó Jordi Cruz.
Para hacer que reaccionen, los chefs decidieron que los 14 aspirantes se enfrentasen a la Prueba de eliminación.
Un postre que amargó a los aspirantes
La primera prueba de la noche consistió en una Caja misteriosa que parecía sencilla. Se trataba de reproducir la tarta de limón de Samantha utilizando otro cítrico para darle personalidad y a más de uno se le atragantó.
Gonzalo reconoció que no se le da bien la repostería, al igual que Cristina y Milagrosa, que no habían hecho una tarta nunca. La más segura de sí misma era Marina, que pretendía brillar en este reto.
"Me parece una maravilla de prueba porque el lemon pie lo hago todas las semanas", dijo la aspirante.
A ver el postre que elaboró, Marina aceptó que era una vergüenza y prefirió no proberlo. Su lemon pie con crema quemada de naranja cayó por su propio peso. Era incluso más fea que la tarta de Cerezo.
Pero no fue la única que falló en esta prueba. Cremas líquidas, masas rotas y nata sin montar... un desastre que el jurado calificó como tarticidio.
Además de este hubo otros incidentes, como en intento de robo de Celia. La vegana se confundió al coger la masa de la nevera y se llevó la de Miguel Ángel. El funerario se la quitó de las manos y Celia, con malos modales, lo tachó de "subnormal".
"Cuando me he dado cuenta del error me he disculpado con él. Me siento fatal y muy arrepentida", afirmó la madrileña.
Dos tartas estuvieron por encima de las del resto: la de Vicky y la de Lorena. Tenían buen sabor y sobre todo una presentación adecuada, que era uno de los aspectos que se exigía en esta prueba.
“No me gusta ninguna de las dos capitanas, son mandonas“
Ellas fueron las capitanes en la Prueba por equipos, algo que no le hizo gracia a Gonzalo: "no me gustaría estar en el equipo de ninguna porque son unas mandonas, con un carácter imposible".
Dos capitanes sin voz ni mando
Los aspirantes aterrizan en el complejo de hangares más grande de Europa, con 12.000 metros2, situado en el aeropuerto Adolfo Suárez- Barajas. Allí, los aspirantes tuvieron que cocinar un menú de larga distancia para 131 pasajeros. Pero no es un menú cualquiera, sino uno creado por Ramón Freixa, chef con dos estrellas Michelin.
Vicky por haber sido la mejor en la prueba anterior forma su equipo completo. Pero el jurado siempre da una vuelta de tuerca y ordena un cambio de delantales a las capitanes de tal forma que la mallorquina forma grupo con los peores aspirantes a su parecer.
Esto junto con una mala elección de los platos a cocinar, deja a Vicky en shock y es incapaz de afrontar el mando. Además de estar desbordada, rechaza la ayuda de Jordi Cruz, algo que molesta tremendamente al chef.
"No valgo para mandar a la gente que conozco. Me he decepcionado a mí misma", confesó.
Lorena también ignora los consejos de Pepe y se deja guiar por Emil, que ejerce de capitán encubierto. Y Celia le echó una mala mirada y criticó su papel como capitán.
"Como capitán tienes que dar menos voces y organizar mejor a la gente; y con buenos modales ante todo", apuntó la vegana.
Al final del reto, los comensales dieron la victoria al equipo de Lorena con una gran mayoría. Sin embargo, en MasterChef siempre decide el jurado...
El castigo más severo de los jueces
... Y ellos deciden que todos deben enfrentarse a la Prueba de eliminación. Ninguno de los platos que cocinaron estuvieron a la altura: en algunos faltaron ingredientes, estaban mal presentados, alimentos crudos o dejarse un trozo de plástico fueron algunos de los errores que cometieron.
Un escarmiento que el jurado espera que sirva para hacerles reaccionar, dejar esa apatía y que demuestren de una vez su talento entre fogones.
Pepe fue especialmente crítico con Emil, al que le ve falta de humildad y sencillez. Ve en el madera de cocinero pero le preocupa la actitud.
“Para mí la humildad es trabajo, atención y dedicación“
"Para mí la humildad es trabajo, atención y dedicación. Y yo me he dedicado en cuerpo y alma", contestó el catalán.
Para Celia fue un nuevo reto ya que tuvieron que cortar y deshuesar un conejo para elaborar el plato. "Para evolucionar en la cocina, estoy evolucionando como persona y cocinando todo lo que me ponen", señaló Celia.
Durante la cata, Jordi tuvo que felicitar a Gonzalo por su receta de conejo a la mexicana.
Menos suerte tuvo Daniel que presentó un plato nefasto. La carne estaba cruda, las alcachofas mal peladas, mal presentadas, en una elaboración sin sentido. Al final y por una mínima diferencia con Cristóbal, el jurado decidió que Daniel abandonase el programa.
"Le he echado muchas ganas e ilusión pero he arriesgado más de la cuenta", dijo.
Se va el arquitecto del programa y un innovador culinario. Daniel fue capaz de cocinar en un lavavajillas y esa ambición por lo nuevo y lo complicado es lo que le abrió y cerró las puertas de MasterChef.