La 'pequeña muerte' de James
- La Petite Mort, un título que contiene la idea de la muerte pero que es alegre
- Trata del deseo de tener la muerte acechándote, porque aprecias más la vida
- "La primera canción que escribí la cantó Morrissey y la tocaron The Smiths"
- "Cuando haces música, tienes que ser capaz de conectar las palabras de tu corazón y de tu espíritu y ser vulnerable"
¡Atención obras!
La agenda cultural de La 2 se emite cada viernes, a las 20h.
A veces, este curro de la tele te da el tremendísimo regalo de conocer a personas grandes de esas que te hacen a ti también un poquito más grande.
La música medicinal
Amo a James desde hace 25 años. Sus canciones me han acompañado en los mejores momentos de mi vida y han amortiguado algunos de los más terribles.
“Porque la música, las artes, curan, eso es así“
Porque la música, las artes, curan, eso es así. Y la voz de Tim Booth, esas letras alegremente tristes y sus melodías melancólicamente bailables me han curado a mí más de una vez. Bailar la tristeza, esa terapia.
“La voz de Tim Booth, esas letras alegremente tristes y sus melodías melancólicamente bailables me han curado a mí más de una vez“
Por eso, haber tenido el inmenso placer de conocerle y poder descubrir que es un ser humano aún más delicioso de lo imaginaba, me ha llenado de alegría el corazón.
Todo esto es sabiduría, amigos. Palabra de Booth:
“En Occidente no celebramos la muerte pero este que traemos ahora no es un disco triste. Nos hemos fijado en los muertos de la iconografía mexicana para la portada del álbum y hemos buscado un título que contuviera la idea de la muerte pero que fuera alegre. Por eso elegimos La Petite Mort, que en francés es un eufemismo para ese maravilloso estado en el que te encuentras tras hacer el amor, cuando ha desaparecido el ego y sientes cierto estado de vacío. Un título que cobra sentido cuando descubres que el álbum está inspirado en las personas que te dejan.
“En Occidente no celebramos la muerte pero este que traemos ahora no es un disco triste“
Pero, básicamente, es una celebración. Una de las canciones, Quicken the Dead, trata del deseo de tener la muerte acechándote continuamente porque hace que aprecies más la vida. Porque todos vamos a morir. Todos vamos a perder a nuestros padres. Todos somos vulnerables.
Cuando haces música, tienes que ser capaz de conectar las palabras de tu corazón y de tu espíritu y ser vulnerable. Si te vuelves muy duro no puedes llegar a tu vulnerabilidad; y si eres muy vulnerable no puedes funcionar. Tienes que encontrar el término medio. Si no encuentras el valor para cantar y escribir desde ese lugar de tu alma eres incapaz de escribir música con la que la gente pueda conectar.
“Cuando haces música, tienes que ser capaz de conectar las palabras de tu corazón y de tu espíritu y ser vulnerable“
Y para mí, la forma de llegar a mí alma es bailando. Siempre lo he sentido así. No sé de dónde me viene. Tenía unos 16 años y recuerdo que, simplemente, me puse a bailar. Descubrí que era una manera de dejar salir toda la ira, toda la tristeza, todo el dolor…
En Manchester, cuando bailaba, la gente se me quedaba mirando. No entendían de qué iba el tema, me lanzaban botellas… Me uní a James porque me vieron bailar en la discoteca y les gustó. Tampoco había escrito nunca canciones. La primera canción que escribí la cantó Morrissey y la tocaron The Smiths. No sabía que podía escribir canciones, no sabía que se me diera bien cantar o bailar. Todo fue por casualidad. Esas habilidades escondidas quizá nunca habrían salido a la luz si no hubiera tenido la suerte de estar en el momento oportuno, en el lugar oportuno, con las personas adecuadas.
“Para mí, la forma de llegar a mí alma es bailando“
Y ahora sigo bailando un montón y eso me conecta con algo superior a mí que me encanta. Es curativo; te relaja. La religión cristiana prohibió bailar cuando se encontraba en su momento más intolerante, más violento, durante la Inquisición. Suponía una amenaza porque bailando entras en contacto con tu sexualidad, te relajas y descubres cosas muy interesantes sobre ti mismo.
“El único poeta con el que me identifico es Rumi, un poeta sufí del siglo XIII que bailaba sin parar y escribía poemas“
Yo hay veces que bailo durante muchos días seguidos -y cuando digo muchos quiero decir MUCHOS. De hecho, siempre escribo a partir del baile. El único poeta con el que me identifico es Rumi, un poeta sufí del siglo XIII que bailaba sin parar y escribía poemas. Eso es para mí el sinónimo de una vida feliz”.