Lucrecia regresa a lo grande, Gonzalo dispara a Nuño y un nuevo personaje planta cara al Cardenal
- Te contamos el capítulo 70 a través de los mejores momentos
- Aviso: si no has visto el capítulo el texto te puede desvelar algunas tramas
La quinta temporada de Águila Roja terminaba por todo lo alto, Gonzalo descubría por fin quién era su madre, al tiempo que ella moría en sus brazos alcanzada por una bala del Comisario. La tristeza y el deseo de venganza se apoderó entonces del héroe.
La sexta temporada ha comenzado con ese sentimiento incontrolable. Gonzalo entierra a Laura de Montignac y le promete justicia. No importa que Hernán sea su hermano. Está dispuesto a ejecutar la venganza. Y así lo hace, Gonzalo le dispara…
Recordábamos también a una Lucrecia moribunda dando a luz a un hijo del Rey, y sus palabras con un hilo de voz: “Recuperaré lo que es mío”.
Pero el camino no es fácil, alguien hace todo lo posible para que Lucrecia cuente lo ocurrido y confiese el paradero de su bebé. Lucrecia es secuestrada y es sometida a una terrible tortura.
Y hasta ahora el Cardenal parecía haber salido vivito y coleando de todo tipo de enredos. Su poder inabarcable le ha hecho inmune y le hado una posición privilegiada ante el Rey y la Reina. Aunque quizás haya llegado su momento. En el capítulo 70 de Águila Roja conocemos a un nuevo personaje, Monseñor Adrián Vega, interpretado por Carles Francino, enviado por el Vaticano, que instala a su comitiva en el Palacio del Cardenal sin contemplaciones. ¿El motivo? Una investigación de vital importancia para el catolicismo…
Ni siquiera la peor de las torturas ha amilanado a Lucrecia. Sus captores la liberan y ella protagoniza la más triunfal de las entradas a Palacio. Allí está su servicio, el Comisario y… ¿Nuño?
Echábamos de menos una escena de acción. Pues llega el momento. El pobre Jacobo, que con toda su buena intención había intentado ayudar a Nuño, es apresado por los hombres del Comisario en el bosque. Águila Roja acude en su ayuda.
Y si de algo estábamos deseosos, era de ver el encuentro de Lucrecia y Sagrario de Castro. El final del capítulo nos brinda uno de los mejores momentos con la difícil decisión de Lucrecia sobre Nuño y su increíble reacción al ver a Sagrario de Castro. No esperábamos menos de la Marquesa de Santillana.
¿Cuáles son las intenciones de Monseñor Adrián Vega? ¿Cómo será ahora la vida en Palacio? ¿Y en la villa? Os dejamos con el avance del próximo capítulo:
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